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La normalización del albo está cerca

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Gimnasia y Tiro vive una pesadilla de la que no puede despertar desde hace más de diez años. Pero en las últimas horas llegó un nuevo augurio esperanzador a la Vicente López con la resolución dictada por la jueza Mirtha Avellaneda, quien interviene en el fideicomiso. La magistrada decidió aprobar el pedido que realizó hace algunos meses un grupo de socios de la institución, quienes proponían un plan de pago para regularizar la deuda más onerosa (con la AFIP). La jueza resolvió que el club se acoja a una moratoria impositiva con el organismo provincial, cuyo pasivo implica más del 50 por ciento de la deuda total. El restante porcentaje de la mora (a los acreedores) se cancelaría a través de un acuerdo con los mismos y para ello se utilizará el dinero de la venta del predio de Bochas a la Obra Social Osde. Los socios del albo le habían propuesto también a la Justicia generar recursos para el club y hacerse cargo del resto de la deuda una vez que la letrada apruebe el mencionado plan de pago, aunque aún no hay respuesta a dicha petición. “La jueza aprobó un plan de pago con la AFIP a 120 meses. A partir de esto, quedan disponibles los fondos para pagarle a los acreedores. Si quiere, la jueza puede comunicar a los acreedores la fecha de pago y ella misma llamar a elecciones y normalizar el club”, le dijo Marcelo Mentesana, socio del club, a El Tribuno. El camino a la normalización está cerca, aunque los tiempos dependerán de la celeridad de la Justicia. Cautela por el caso del Bocha Rodríguez Las malas experiencias obligan al cuerpo técnico de Gimnasia y Tiro a mantener cautela y a no arriesgarse a arrojar pronósticos apresurados en relación con la lesión de un jugador. Por esta razón, si bien el resultado de la resonancia magnética a Federico Rodríguez en su rodilla izquierda no reviste gravedad y se trataría de un golpe en los meniscos, el cuerpo médico prefiere esperar y analizar a fondo con otro estudio. Entre hoy y mañana se conocerá el diagnóstico definitivo. Por otra parte, el volante Luciano Cabrera quedó descartado para el clásico de esta noche por una sobrecarga muscular en el isquiotibial. En otro orden, los refuerzos de la entidad arreglaron ayer sus convenios con la entidad. Serán doce los jugadores que se regirán con contratos profesionales.

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