Los planetas se alinearon a tiempo. Todas y cada una de las piezas se ensamblaron en el momento justo y San Martín terminó con la sequía maldita, esa que duró 140 días. Sí; por fin el “santo” pudo sacarse la mufa y volvió a cantar victoria frente a su gente.
El 3-1 no se discute, a pesar de que a los 5’ del complemento con el gol de Leandro Armani, los fantasmas volvieron a sobrevolar La Ciudadela. Pero no, no fue más de lo mismo. En ese preciso instante, justo cuando se desataba el feroz aguacero del domingo, se produjo el clic que necesitaban todos.
Con el 0-1, el estadio explotó. Pero no de bronca. El público comenzó a alentar hasta enrojecer todas las gargantas y hacer crujir el cemento. Y el equipo hizo el resto. Los cambios que metió Arnaldo Sialle encajaron como anillo al dedo, e impulsado por su gente, San Martín se llevó por delante a Tiro y lo sentenció con una lluvia de goles.
“Estamos felices porque se ganó a lo San Martín”, dijo Jorge Garber, luego de salir de un vestuario que desbordaba felicidad. “Tuvimos pasajes de buen fútbol y mucha actitud. Los muchachos demostraron que, cuando se lo proponen, están para grandes cosas; y eso nos llena de felicidad. Esta CD está a muerte con ellos y los apoyará hasta el final”, remató el presidente.
Roberto Sagra fue otro de los dirigentes que fueron a felicitar a los jugadores al vestuario. “Nunca dudé de la actitud de los muchachos. Esta victoria servirá para levantar en lo anímico que venía bajo por la falta de victorias”, dijo el “vice”.
