“¡Largá la pelota, carajo! No la podés tener 10 segundos”. Hacía un par de minutos que había comenzado el primer ensayo futbolístico y Leonardo Nadaya ponía su sello. El entrenador interino de Instituto, que dirigirá el sábado a las 19.30 contra Atlético Tucumán, mostró el mismo carácter que en la primera local, con la que recientemente logró el ascenso en la LCF. Mientras los directivos buscan al sucesor de Darío Franco, el provisorio entrenador dirigió a su estilo. Comenzó con un trabajo en defensa, mientras Elvio Agüero coordinaba los ejercicios en ofensiva. Además, el “profe” Antonio Russo hacía su parte. Al final, Nadaya paró durante 10 minutos un equipo, que probablemente sea el que pruebe en la práctica de fútbol de hoy, a las 9 en Alta Córdoba. Los elegidos de ayer fueron: Chiarini; Coronel, Sánchez, Báez y Delmonte; Piermarteri, Correa, Vismara y Bazán; Burzio y Velázquez. “Trabajamos en recuperar la mentalidad de los jugadores, por lo que sucedió ayer, con la ida de un técnico que es querido por todos”, afirmó Nadaya. Sobre su adaptación al trabajo con profesionales, afirmó: “Para mí es lo mismo. Si me pongo a pensar donde estoy, tengo que hacer un curso. Me manejo como siempre, trato de transmitir mi pensamiento y que me entiendan los jugadores”. Y sobre sus gritos, Nadaya fue transparente: “Es mi personalidad, así soy y no voy a cambiar. Tendrán que entender que es mi forma de ser y no tengo ninguna mala intención, sino buscar que corrijan cosas simples que veo y se las quiero marcar porque hay poco tiempo”. Sin DT Desde el club se informó que oficialmente no hubo contactos con ningún entrenador. Hoy se reunirá el departamento fútbol, para definir el perfil pretendido y se propondrán candidatos. El vice tercero, Carlos Giusti, afirmó: “No hay nada definido en cuanto al técnico. Empezaremos a conversar dentro del departamento fútbol, se definirá un perfil de técnico y luego comenzaremos a buscar”. A los candidatos que sonaban (Fuentes, Kudelka, Cocca), ayer se sumó Facundo Sava. Adiós a Franco. Anoche en Salsipuedes el entrenador Darío Franco y los integrantes de su cuerpo técnico participaron de una cena de despedida que le organizó el grupo de exdirigentes con quienes tenía buena relación. Durante el año y medio que duró el ciclo de Franco al frente del primer equipo de la Gloria fue una costumbre el encuentro semanal, incluso luego de que se produjera el alejamiento del grupo de dirigentes. En la despedida, el entrenador valoró el buen gesto que se llevó de parte de los presentes.