Independiente no se clasificó, pero se salvó del descenso. Landeiro se va.
"Hay cosas que me hacen ver un futuro cada vez más alejado del fútbol". Las palabras las había enunciado el entrenador Diego Landeiro luego de la derrota como local ante Deportivo Roca, dos fechas antes del final de la reválida.
El domingo, luego de que Independiente venciera por 1 a 0 a Rivadavia de Lincoln en casa (jugando uno de los mejores partidos de toda la temporada), el Rojo quedó fuera de los clasificados y su entrenador ya le comunicó a la dirigencia su decisión de dejar el club. "No voy a seguir en el cargo, ya se lo dije a Gastón (Sobisch)", confirmó en declaraciones a Radiodeportes de LU5.
"Nunca me había tocado jugar para salvar la categoría, y la verdad que la presión es muy grande", había asegurado algunas fechas atrás.
Todos signos que presagiaban este final anunciado. El Coco reflotó a un Independiente al que agarró hundido, pero muchos factores hicieron que su continuidad sea imposible, e incluso con chances de alejarse completamente de la dirección técnica. "No sé todavía si tengo ganas de seguir dirigiendo", lanzó además respecto a su futuro.
Por otro lado, deslizó uno de los motivos por los cuales tomó la decisión y dejó entrever que desde algún sector se interfirió en el armado del equipo. "Cada uno tiene que cumplir su función en el club y no que todos opinen de todo", aseguró.
El plantel se reunirá hoy y luego quedará licenciado hasta el arranque del nuevo torneo. La dirigencia ya piensa en un reemplazo para armar con tiempo la temporada que se viene.
28 puntos sumó el Rojo en 26 partidos jugados.
Terminó con un promedio de 1.0769 y se salvó del descenso pero no le alcanzó para seguir en carrera aunque quedó afuera sólo por diferencia de gol.
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