El Luto habló después de su salida del Azul, contó su verdad y el dolor que vivió. El ullunero quería despedirse del fútbol jugando en cancha para agradecerle el cariño a la gente.
Pasaron algo más de 72 horas desde que tomó la decisión de alejarse de Unión. Después de asumir en parte su salida decidió hablar y sobre todo agradecer.
El Luto Cesar Alfredo Molina habló en el programa Café a la Turca de radio Antena 1 y contó como vivió el fin de semana más triste de sus ultimos años de futbolista.
"No se si en mi vida lloré como lo hice este fin de semana. Apagué el teléfono y lo prendí el domingo por la noche cuando volvía a casa. Me aparecieron llamadas perdidas, mensajes de texto y de whatsapp. Soy un agradecido de la gente de Unión, que me dio mucho y durante en estos últimos 6 años me entregaron su cariño y afecto. No he podido terminar de leer todos los mensaje en el face. Cuando yo tomé la decisión de dejar Unión fue por que el técnico no me tiene en cuenta. Nunca tuve un problema con él y cuando pase a despedirme el viernes solo atinó a decirme que la decisión era futbolística", comenzó contando el ullunero que no estuvo en los dos ultimos partidos de Unión por exclusiva responsabilidad del entrenador Mauricio Del Cero.
El Luto entrenó hasta el viernes pasado y cuando conoció que no estaba entre los concentrados decidió despedirse de sus compañeros. "Todo estaba muy bien, yo habia participado de todos los partidos, salvo cuando me operaron e incluso volví antes de tiempo. No tuve mayores lesiones y la verdad que me causó sorpresa no estar en un partido tan importante como el que se jugaba con Zapla en Jujuy. Como jugador quería estar y no entendía que había pasado. Le pregunté a los dirigentes y me dijeron que ellos no sabían nada y que la decisión era del técnico. En la semana previa a este ultimo partido ya empecé a ver que no participaba de todos los trabajos y cuando hizo fútbol el miércoles y el jueves a mi mandó hacer otro trabajo. Lo hablé con mi familia y me pidieron que esperara hasta el viernes. Cuando el técnico separó a los jugadores que iban a concentrar yo dije esto no va más. Me bañé y me despedí de todos e incluso del cuerpo técnico. Fue muy doloroso para mi la decisión pero entendí que era lo mejor. Si no me van a tener en cuenta para que provocarle gastos a la dirigencia sin sentido. No pude hablar con Juan (Ramírez) en ese momento pero después le comunique mi decisión" continuó contando el ídolo de los hinchas de Unión.
Lo que extraña de la determinación de Del Cero es que hasta antes del paro lo tuvo en cuenta, pero después lo borró. El Luto Molina fue un activo intermediario para que se solucione el problema y los jugadores viajaran y volvieran a entrenar. "Yo solo hice una gestión para que se puedan reunir los dirigentes con la gente de la Secretaria de Deportes. Todo se arregló pero yo no intervine para nada. Me dolió mucho la eliminación porque mis compañeros ni Unión se lo merecían. Yo no le deseo mal a nadie y solo quiero lo mejor para la institución que me cobijó durante seis años. Viví buenas y malas, pero fui feliz en este club y se que volveré algún día", concluyó el Luto, el señor futbol que fue castigado por uno que de fútbol al parecer poco sabe.
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