Con gol en el tercer minuto de adición, Chicago derrotó a Riestra en Mataderos 1 a 0 y cortó una racha de ocho partidos sin triunfos. Gabriel Avalos hizo el tanto con el que Serrizuela debutó ganando en el "Torito". Riestra no pudo sostener el empate y complica su permanencia fecha a fecha.
Se iba el partido, se esfumaba la primera fecha del 2018, las gargantas secas, los suspiros de disconformidad…el punto no le servía a ninguno. Pero en el enésimo centro desde los costados, casi todos por abajo complicando a los centrales de Riestra, Hernández dejó corta la pelota y Avalos tocó de zurda al gol para romper el cero, para mojar las gargantas de alegría y para que ese suspiro de disconformidad , se convierta en suspiro de desahogo. No quedaba tiempo para más, sacó Riestra, intentó el pelotazo largo, rechazó la defensa y pitó Castro el final. Ganó Chicago, después de 8 partidos, después de 4 meses, el "Torito" sumó de a tres, se sacó la mufa y empezó el año y el ciclo Serrizuela con una sonrisa.
Claro, antes de ese grito de euforia, hubo 93 minutos de un partido intenso, no con mucho juego pero sí con vértigo y situaciones de gol en ambas áreas, sobretodo en el complemento.
Serrizuela arrancó con tres en el fondo y con dos laterales volantes como Vivas y Monteagudo, más que nada para contener las posibles contras de Riestra, sabiendo de la velocidad por afuera de sus jugadores. Igualmente esos tres pocas veces fueron cinco, al contrario, Vivas y Monteagudo terminaron siendo punteros por ambas bandas. Quiroga comenzó jugando al lado de Teijo, el único mediocampista central neto del equipo, pero como Valdez Chamorro retrocedía mucho para hacerse de la pelota, Quiroga se soltó, terminó siendo ladero de Vivas por derecha y dejó a Teijo solo en el medio. Poco participativo Gomito en ese primer tiempo, Aranda jugando de espaldas al arco, perdiendo en los duelos con los centrales visitantes. Chicago se repetía en centros altos a un área con poca gente verdinegra donde siempre ganaba Riestra, aunque a veces los centrales y el arquero se complicaban solos. Sólo el atrevimiento de Chamorro y su cambio de ritmo podían ilusionar al "Torito". Riestra mostró ganas y atrevimiento en los primeros 20 minutos, con su juego clásico, rapidez por las bandas, juego corto y tratar de llegar al fondo para mandar el centro atrás. Bravo por un lado, Sánchez por el otro, con Benítez peleando con los centrales y apostando a la velocidad del chiquito Fernández. Pero lentamente la visita fue retrocediendo en el campo, las líneas de cuatro fueron cada vez más marcadas y los de arriba quedaron solos. Así y todo, contó con las dos chances más claras del primer tiempo. Dos contras similares, mal retroceso de los medios del local, Sánchez en la primera jugada enganchó y remató muy débil a las manos de Requena. Y en la segunda, Sánchez abrió a la entrada solitaria de Bochi que le alcanzó la pelota a las manos al uno de Mataderos.
Cambió por completo el segundo tiempo. Chicago salió con otro ímpetu, con otra ferocidad. Teijo se plantó como único mediocampista central y mejoró notablemente su rendimiento. Tuvo ubicuidad, presionó más alto, recuperó más rápido y a partir de allí, el verdinegro atacó permanentemente. Quiroga jugó más arriba con Valdez Chamorro, haciendo de doble enlace. Chamorro siguió siendo el más incisivo, se hizo cargo del equipo, Gomito se liberó y se asoció con el ex Lanús y Chicago creció. Vivas y Monteagudo llegaron al fondo con mayor claridad y aparecieron las primeras situaciones de gol del local. Vivas le quemó las manos a Hernández, Aranda lo erró de cabeza en el área chica, otra vez Vivas no supo definir ante la salida del arquero y Aranda remató cruzado en otra clara. Chicago era más, Riestra no encontraba las contras, Achucarro se adelantaba y anticipaba y por eso Jorge Benítez cambió rápido a los dos puntas. Soto y Stable por Fernández y Benítez. Cada ataque del local daba la sensación de que terminaba en gol, Aranda rebotaba bien, Gomito más suelto buscaba profundidad, y sobre todo los centros de Vivas y Aranda eran por abajo, no tanto por arriba, y así complicaban a los altos centrales visitantes y a Hernández que no se mostraba seguro. En uno de esos centros bajos, Aranda llegó al gol pero el grito se silenció rápidamente por off side del punta.
Serrizuela se dio cuenta que necesitaba un hombre que pelee con los defensores, sacó a Quiroga y a la cancha Avalos, con Gomito jugando más atrás.
Pero el partido se rompió pasados los 20. La bajó el ídolo de Chicago en el segundo palo y cuando Aranda se disponía a tocar al gol, Silvani lo anticipó y chocaron las cabezas. El zaguero tuvo que ser atendido, el partido se enfrió, Gomito acalambrado le dejó lugar al Gordo Núñez y el partido volvió a cambiar. El parate benefició a Riestra, Chicago perdió intensidad, Riestra encontró respiro y tuvo más salida. Con tres puntas definidos y con Chamorro cansado, el local se partió y perdió el juego del inicio del complemento. La visita volvió a salir de contra y volvió a tener una clara, muy clara. Pase a la diagonal de Stable que quedó cara a cara con Requena y no se animó a pegarle al segundo palo, pase al medio y Sánchez que quiso taquear la pelota y le dio pifiado y salió por el segundo palo. Se tomaban las cabezas en todo el banco visitante. Con Chamorro cansado, Serrizuela mandó a Vivas al medio pero perdió profundidad por afuera, donde entró Cosi, con más vocación de defensa que de ataque, cuando quizás Mater podía darle otro ritmo. Bravo le reventó la cara al uno del dueño de casa en una jugada preparada a poco del final.
Y cuando los cambios no le habían dado resultado al DT, cuando esos cambios partieron al equipo y le hicieron perder profundidad por los costados, todo análisis quedó en la nada porque los tres ingresados participaron del gol del final.
Desbordó Cosi, mandó el centro por bajo al área chica, Núñez fue a buscar la pelota y presionó sobre la salida de Hernández y el cierre de Gustavo Benítez, el arquero la dejó muerta y reaccionó antes que todos Gabriel Avalos para tocar de zurda a la red y desatar el delirio en la tribuna.
En un partido equilibrado y parejo, terminó ganando el que más propuso y lo hizo cuando menos ideas tenía, cuando lo bueno ya había pasado.
Chicago puede empezar a creer que puede salir del fondo y pelear más arriba. Riestra deberá empezar a sumar de a tres rápida y seguidamente para ilusionarse con la salvación.
SINTESIS
NUEVA CHICAGO (1): Leandro Requena; Leandro Gioda, Adrián González, David Achucarro; Gonzalo Vivas, Leandro Teijo, Juan Cruz Monteagudo; Franco Quiroga (63, Gabriel Avalos), Jorge Valdez Chamorro (78, Julián Cosi); Christian Gómez(c) (68, Leonel Núñez) y Alejandro Aranda. DT: Juan José Serrizuela.
Suplentes: Alan Minaglia, Norberto Palmieri, Facundo Mater y Alexis Vázquez.
DEPORTIVO RIESTRA (0): Sebastián Hernández; Leandro Collavini, Daniel Silvani, Gustavo Benítez(c), Roberto Bochi; Gonzalo Bravo, Sebastián López, Mauricio Soto, Brian Sánchez; Mauricio Fernández (53, Facundo Stable) y Nahuel Benítez (55, Sebastián Soto). DT: Jorge Benítez.
Suplentes: Carlos Morel, Sebastián Lamacchia, Gastón Montero, Jonatan Goya y Ramón Borda.
GOLES: (93) Gabriel Avalos (NCH).
AMONESTADOS: Teijo, Gioda (NCH).
EXPULSADOS: No hubo.
INCIDENCIAS: No hubo.
LA FIGURA: Jorge Valdez Chamorro (NCH).
ARBITRO: Alejandro Castro (bien).
ASISTENTES: Gerardo Carretero y Juan Manuel Vázquez.
CUARTO ARBITRO: Ignacio Lupani.
ESTADIO: Nueva Chicago.
CAMPO DE JUEGO: Regular.
PUBLICO: 7.000 personas aprox.
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