El Rojo neuquino salió de la zona del descenso después de ganar en La Chacra. El fin de semana juega en Cerri su último partido de la reválida.
Una fecha antes de su último partido en la reválida del Federal A, Independiente de Neuquén dio el gran golpe en La Chacra y respira en la pelea por la permanencia en la divisional.
El conjunto que dirige Diego Trotta superó a Rivadavia de Lincoln 3 a 1, después de dar vuelta el resultado adverso con el que había comenzado la tarde dominguera con el tanto de Facundo Graziano. Iván Marcolini, Alan Vivanco y Guido Abayián fueron los goleadores para el dueño de casa.
De esta manera, el condenado transitoriamente al fondo de la tabla de los promedios ahora es el conjunto de Lincoln, que en la última fecha vendrá a La Visera.
Antes, la formación que dirige Fabio Schiavi recibirá a Deportivo Madryn y es allí donde puede sacar una pequeña luz de ventaja respecto del Capataz y del otro equipo zonal involucrado, ya que los ahora dirigidos por Germán Alecha deberán quedar libres el fin de semana que viene.
Panorama más que complicado para el Albinegro, que una de las pocas cosas positivas que rescata en este momento es seguir dependiendo de sí mismo.
El 25 de marzo en La Visera, cuando vuelva a ser local, se juega una final por la permanencia después de no haber ganado sobre el sintético ningún partido durante el 2018 en la división de ascenso, ni siquiera habiendo marcado goles en sus presentaciones con Sansinena, Deportivo Madryn e Independiente.
Los únicos puntos sumados hasta el momento fueron como visitante, en Neuquén donde ganó y en Lincoln donde empató ante un adversario que parecía alejado de todos los problemas y que ahora también quedó muy obligado.
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