El defensor, referente del conjunto aurirrojo, aseguró que perder la categoría "fue un mazazo" y que "fue culpa de todos". Seguir jugando al fútbol dependerá de su "familia y del club", dijo.
El sentido de pertenencia hace muchas veces que el duelo en situaciones límites sacuda mucho más. Y así lo entendió Rolando Ricardone, defensor y uno de los máximos referentes actuales en el plantel de Boca Unidos.
El descenso del conjunto aurirrojo desde la B Nacional, luego de una década de ininterrumpida participación, pegó de distintas formas y claramente para algunos, como Ricardone, fue muy duro.
"Nadie más que yo puede sentir el dolor" dijo el Gordo en declaraciones al programa radial República Aurirroja, y agregó: "Yo fui parte de las dos estrellas que tiene el club y fue un mazazo haber descendido".
Ricardone puso el ojo sobre las generaciones futuras de la entidad correntina, y fue claro al mencionar que "tendrán que pelearla".
"Mi dolor más grande de haber descendido es por los chicos del club. Yo no tengo muchos más años de carrera pero ellos sí tienen un futuro enorme y tendrán que pelearla para poner a Boca Unidos nuevamente en la categoría que merece", dijo el lateral oriundo de la vecina provincia del Chaco.
En un breve análisis de lo que fue la pérdida de la categoría, Ricardone sostuvo que "en este momento, cuando ya están dadas así las cosas, no sirve de nada echar culpas y matarnos entre todos. Lo cierto es que la culpa es de todos".
En el final de la entrevista con el programa partidario del club de la Ribera, el Gordo dijo que aún no definió el futuro de su carrera.
"Estoy a entera disposición de Boca Unidos, eso no es negociable, pero lo cierto es que todavía no decidí mi futuro", aseguró el jugador surgido en Chaco For Ever y sorprendió al mencionar: "Si sigo jugando al fútbol es por mi familia, pero es cuestión de charlar con la dirigencia y el cuerpo técnico", finalizó.
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