Primera Nacional - INDEPENDIENTE RIVADAVIA

Defender para ganar

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Encontrar un esqueleto que explique la disposición táctica de Independiente Rivadavia se hace enredado. El 5-3-2 es quizá el que mejor le sienta. ¡Cinco defensores! Sí, son cinco y allí -en eso que para usted puede parecer una locura- es donde hay que comenzar a revelar los argumentos de la victoria de la Lepra en Lomas de Zamora.

Rébola se para apenas por detrás de una línea de cuatro defensores: Navas, Zules Caicedo, Rodríguez y Negri. ¿Negri lateral? Sí, créalo. Negri arranca bien de marcador de punta, y de los dos laterales es el que más responsabilidades ofensivas tiene (ha comenzado a construir una sociedad interesante con Quiroga en los últimos metros del ataque).

Zules Caicedo y Rodríguez van sobre los dos hombres de punta, Rébola queda como libre mientras que Navas y Negri toman a los atacantes por afuera. Y a este bloque de cinco defensores hay que sumar a Úbeda, quien está apenas unos metros por delante de los marcadores centrales para tomar a ese mediapunta por el centro o enlace, dependiendo del dibujo del adversario de turno. Ya con seis hombres con celosas obligaciones defensivas, lo de Imperiale y Quiroga se trata más de ocupar espacios en el retroceso, que de predisposición en la marca.

Independiente defendió bien. Es cierto, pero lo primero que hay que remarcar es que la Lepra pone seis hombres casi exclusivamente para esta tarea. Ganó en más oportunidades por tener mayor cantidad de hombres predispuestos a defender, que por la propia efectividad en la marca. Lo que no significa que no hubo brillo individual (lo de Rodríguez y Zules Caicedo sobresalió claramente). De hecho, el propio Gómez remarcó de un buen trabajo del "bloque defensivo".

Pero claro, al tener tanta gente en pos de la marca, la Lepra, se sabe, va a llegar con poca gente con características netamente ofensivas al área de enfrente (Negri es claramente quien ‘compensa’ ese algoritmo del fútbol que habla de 5 para defender y 5 para atacar). Bajo este molde con principal foco en la marca, Independiente va a necesitar imperiosamente de transiciones rápidas. Y esto por sí solo tampoco tiene sentido sino va acompañado de precisión. Es decir, la Lepra deberá desplegarse en ofensivo con mucha velocidad, hacer pases hacia adelante con extrema precisión y ser contundente dentro del área. Y en este punto es donde más falló en Lomas de Zamora.

Hay una idea clara de Gómez de cómo se va a jugar. Los jugadores han sabido interpretarla, aunque aún falta que la hagan propia, que la idea se les haga carne. Se puede estar de acuerdo o no con las formas, pero lo concreto es que todos ya sabemos a qué juega la Lepra. Y eso ya es un gran avance con respecto a otros equipos.