Primera Nacional - ATLÉTICO RAFAELA

Se cumplen 31 años de la llegada de Atlético a la B Nacional

Atlético Rafaela, Primera Nacional, Fútbol, Ascenso.
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El 4 de junio de 1989, el Celeste cumplía un viejo anhelo, llegar al fútbol profesional de la Argentina. Luego lograría un hecho insólito para un club del interior del interior, mantenerse durante 31 años en el máximo nivel, con dos pasos por la Primera División donde la ciudad recibió a los «Grandes» del país.

Es cierto que en la historia de un club hay variados recuerdos que estarán por siempre en la mente de los hinchas y socios, pero especialmente de aquellos que fueron partícipes de grandes epopeyas deportivas, esas que hoy parece ir desapareciendo con el correr de los años pero que la cuarentena del Coronavirus nos permitió a muchas traerlas a la actualidad. Pero en Atlético, el hecho fundacional para «su» gran historia en el fútbol será el ascenso al Nacional «B», logro conseguido un día como hoy hace 31 años en Ledesma, provincia de Jujuy.

El plantel que dirigía Horacio Bongiovanni fue un campeón implacable. De los 24 partidos que disputó, ganó 17 e igualó los 7 restantes, permaneciendo invicto. Convirtió 58 goles con un promedio de 2,41 goles por encuentro y una eficacia en puntos obtenido) del 85,41%, sufriendo solamente 12 goles en contra. El máximo goleador fue Carlos Marcelo Fuentes, con 20 conversiones, seguido por Marcelo López con 15, Fabián Giordano con 9, Walter Gómez con 4, Juan Ramón Poelman con 3, Gustavo Alfaro con 2 y Pablo Cárdenas, Rubén César, Marcelo Riberi y Hugo Querini con 1.

En Jujuy, con 24º de temperatura y más de 12.000 espectadores, de los cuales 400 eran cremosos, estuvo el corresponsal de CASTELLANOS, Miguel González, que realizó este comentario del partido: Atlético viajó a Jujuy con cierta tranquilidad y bien concientizado para afrontar el segundo y definitivo partido ante Atlético Ledesma, no solo por la ventaja de los goles, sino porque se sentía un equipo de mayor nivel que el jujeño. Pero consciente también en lo difícil que se hacía este compromiso definitorio. Cualquier adversidad podía presentarse. No resultó así. Todo salió a pedir de Atlético que logró controlar un partido que no fue muy brillante en la faz técnica, pero que ofreció las ventajas que Atlético supo contabilizar a su favor para ganar en forma brillante lo que se presentaba difícil y lograr así la clasificación al Nacional «B», al fútbol «grande» que ya estaba reclamando la presencia del fútbol rafaelino. Atlético consiguió su objetivo. Ganó nuestro fútbol.

El partido

En definitiva los primeros 45 minutos fueron un buen «negocio» para un Atlético que se paró bien en un campo de juego mojado y muy pesado. Y ante un equipo local desesperado por buscar el gol que tuvo la iniciativa y la pelota, pero que la trasladó con lentitud excediéndose en pelotazos buscando la cabeza de algún delantero, los que solo inquietaron un par de veces a un Marino -que pese a jugar lesionado- respondió muy bien. Por su parte Levrino tomó muy bien a Maladot, mientras que Querini cumplía bien con su labor de líbero. A Atlético le faltó mayor peso en medio juego, ya que Bernasconi no encontraba ubicación al igual que Marcelo López. Pero de todas formas Atlético cuando consiguió la pelota la hizo correr más rápido creando alguna situación inquietante. En el local preocupaban las subidas de Leal que ganaba las espaldas de los volantes de Atlético.

Hasta el final de la primera etapa todo transcurrió con las mismas características pero con un Atlético de Rafaela con el partido bajo control. Se inicia el segundo tiempo y se preveía que la desesperación iba a ganar a los jugadores locales y quizás podía permitir a nuestro Atlético un «negocio redondo». Lo que se dio a todas luces. Ledesma siguió desesperándose y Atlético fue creciendo. Plantando una defensa que alcanzó gran nivel. Creciendo el trabajo creativo de Marcelo López y todos luchando en forma leal hasta que a los 20 minutos llega un claro penal a favor del equipo de Bongiovanni que López concreta en el primer gol. A partir de ahí y Atlético con un hombre más, fue ganando en todos los sectores del campo de juego y se sucedieron las mejores jugadas ofensivas con un César que entró muy metido en el partido, con Bernasconi que fue retomando su nivel para acompañar junto a Alfaro lo bueno que hacía López y hasta el recién ingresado Poelman, quién después de perderse una segunda conquista en un mano a mano con el arquero, llega a concretar el segundo gol.

Y a los 40′ llega el sello brillante: tercer gol, obra genial de Marcelo López que arrastró a toda la defensa encarando desde medio campo para enfrentar al arquero y concretar un brillante gol. Pudieron ser más…pero ¿para qué? La hazaña ya estaba consumada y hasta la pitada final todo era festejo en el lejano estadio jujeño por parte de ese grupo de personas que viajó para alentar al fútbol rafaelino.