El arquero de Alvarado no se conforma con la clasificación al Nonagonal ni piensa de manera anticipada en las vacaciones. Tiene la cabeza puesta en Belgrano de Santa Rosa, al que el "torito" visita desde las 21.
Es obsesivo. Se lo puede ver en los entrenamientos, siempre al 100%, enfocado en su trabajo y buscando mejorar en el día a día. Cuando las lesiones aparecieron, las dos veces en Carlos Casares, al otro día comenzó con la recuperación y se puso como meta volver lo más rápido posible. Por eso, no sorprende que Mauro Beltramella casi no hable de quién puede ser el futuro técnico de Alvarado, ni de lo que serán las vacaciones. Como lo hace con cada partido que afronta, el de esta noche a las 21 ante Belgrano en Santa Rosa lo toma como una final y quiere terminar con el arco en cero, porque eso le asegurará un lugar en la Copa Argentina. El "torito" se despide de la zona 2 del Federal A con la tranquilidad de ser el único clasificado y buscando al menos un empate que lo clasifique.
-Se consiguió el primer objetivo y viene uno por delante, como la Copa Argentina, por lo que significa ese torneo.
-Sí, primero que nada contento por el objetivo primordial que era la clasificación, lo logramos una fecha antes que no es poca cosa, pero queda un partido muy importante para seguir sumando, para seguir consolidándonos como equipo y con una meta también, secundaria, pero importante como es entrar a la Copa Argentina. Es un torneo que puede dar mucho prestigio, que te puede enfrentar con equipos de otras categorías.
-¿Sienten que la salida de Botella dejó un poco a un costado la clasificación y se habló más de eso que del objetivo alcanzado?
-Yo creo que son dos cosas totalmente distintas. Nada opaca el logro obtenido por el club, por el equipo, por los dirigentes, porque es, desde el primer día que estoy acá, el objetivo de base tanto de los jugadores como de todo el club. Y la salida de Duilio es un punto y aparte, él tendrá sus razones, pero yo considero que se hizo un muy buen trabajo, en lo deportivo estamos muy bien, creo que el club está creciendo a grandes pasos y le deseamos lo mejor al cuerpo técnico saliente porque dejó bien parado al club. Son dos cosas distintas, una no opaca la otra, se hizo un semestre muy bueno y eso es lo más importante.
-¿Genera incertidumbre saber quién será el próximo técnico?
-Se habla mucho, pero la realidad es que nosotros hoy tenemos un cuerpo técnico que son Padilla y Gatti y nos debemos a ellos. Después, el que venga, será responsabilidad de los dirigentes y nosotros tenemos que estar a las órdenes y bien predispuestos para el entrenador que venga. Sabemos que todos tienen una metodología distinta de trabajar, todos tienen sus cosas buenas, sus cosas más o menos y sus cosas malas. A nosotros los que nos tiene que importar es el resultado final que es llevar a Alvarado lo más alto posible.
-¿Qué balance hacés en lo grupal y personal de este primer semestre en Alvarado?
-En lo grupal más que positivo, a lo largo de la primera fase no bajamos del primer o segundo lugar de la zona, mucho tiempo arriba de todos en la tabla. En algún momento por ahí estuvimos segundos, pero siempre en zona de clasificación, lo que es muy positivo para el grupo, para el club y para las individualidades, porque cuando uno está puntero hablan de los equipos que están ahí, de los que están abajo no habla nadie, es una realidad. Y en lo personal, muy contento, venía de un año muy duro, con cosas personales que me dieron muchas fuerzas y terminando el año con un buen rendimiento a mi criterio y pudiendo disfrutar de estar adentro de una cancha de fútbol, que seguramente muchos no deben saber esto pero yo a principio de año iba a dejar de jugar, pero una persona me dio la fuerza y mi familia la fortaleza de seguir en el fútbol que es muy lindo.
-¿Se puede saber quién es esa persona?
-Sí, yo estaba con un problema de salud y me llamaron para jugar en Primera División. Me llama el preparador físico de Caruso Lombardi, Luis Nucara (lo dirigieron en Tristán Suárez), y me ofrece irme a jugar a primera y es una oportunidad que había estado esperando mucho. Pero me llegó en un momento que no era el indicado para mí y me dijo que me deje de romper las bolas, que tenía mucho para dar. Eso me enchufó, mi familia me apoyó y le metí otra vez hacha y tiza para ponerme bien.
-Y ahora a disfrutar un poco las vacaciones, seguramente en tu Olavarría natal, después de un semestre muy duro, con muchos partidos seguidos y poco descanso.
-Te voy a ser sincero, yo estoy enfocado en el partido del sábado, no puedo pensar en las vacaciones ahora teniendo eso por delante. Después que pase Belgrano sí, a recuperar energías, a descansar, a disfrutar de la familia, que este campeonato jugando miércoles y domingo no ha dado mucha lugar a estar con ellos. Uno se toma el fútbol con mucho profesionalismo y cuando se juega así estás pendiente de un partido tras otro, con muchos viajes, los partidos de visitante seguidos, hicieron que sea desgastante. Pero todavía queda una fecha, hay que conseguir un buen resultado y después sí disfrutar los días de descanso.
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