El cuerpo técnico de Patronato quiere recuperar físicamente al punta, quien hace un año aproximadamente viene acarreando una lesión de la cual no se cura. En Patrón quieren recobrar al Wachi que enamoró a los hinchas. El futbolista trabajará de manera diferenciada.
Hace aproximadamente un año que Leonardo Acosta viene padeciendo una pubalgia que lo tiene a mal traer. El dolor se torna insoportable y obliga a que el delantero no pueda trabajar con la comodidad que lo supo hacer en un pasado. Esta dolencia produjo un decaimiento en el rendimiento del jugador, que ha llevado a que pierda su lugar dentro del equipo titular de Patronato. El problema físico aparece constantemente cada vez que el Wachi se exige y es normal entre semana verlo trabajar de manera diferenciada al resto de sus compañeros.
Por esto, el cuerpo técnico que conduce Sergio Lippi decidió que el atacante comience un período de recuperación y que no participe en las próximas semanas de los ensayos formales del primer equipo del club de barrio Villa Sarmiento.
“La idea es contar con el futbolista que todos conocimos, el que marcaba diferencias y te volvía loco”, dijo un allegado al cuerpo técnico durante la mañana de ayer, mientras el jugador se movía junto a Edgardo Brittes de manera diferenciada.
Los números de Leo acreditan que no está pasando por su mejor momento y es por eso que solo ha convertido un tanto en los últimos doce meses, fue ante Banfield en Paraná, por la 32ª fecha de la pasada temporada. Allí el jugador de barrio 25 de Mayo ingresó en el segundo tiempo en reemplazo de César Carignano y marcó el segundo tanto en la victoria ante el Taladro.
Esta lesión, que se pudo haber generado por un acortamiento de los miembros inferiores o bien por sobreentrenamiento o mala calidad de los terrenos, como así también por otros factores, es muy dolorosa y si no se trata de buena manera no solamente afecta para la práctica deportiva, sino que también perjudica en las actividades diarias que cualquier persona puede realizar fuera del deporte.
El correcto tratamiento fisioterapéutico de la pubalgia, generalmente se plantea primero con un tratamiento conservador basado en el cese de la actividad deportiva y la implantación de un buen plan de fisioterapia.
El jugador sin dudas que no debe estar muy feliz con la decisión, pero por lo mencionado por la gente cercana al plantel, es lo mejor que le puede pasar, parar, recuperarse y volver a trabajar con una mejor condición física, que sirva para levantar el ánimo y el espíritu. Está claro que Acosta no se olvidó de jugar al fútbol, esta dolencia le está jugando una mala pasada y una vez que no esté probablemente volverá a ser el que todos quieren ver.
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