Mancuello ha sido uno de los portavoces de la autocrítica del Rojo durante este mal momento afuera de zona de ascenso. Contra Crucero no fue la excepción: "Es hora que nos despertemos. Jugábamos una final y no nos pueden hacer los goles que nos hicieron".
Independiente quiere y se rehúsa a perder la esperanza del ascenso, pero la autocrítica debe ser interna para que cambie la cara de un equipo muy limitado en Misiones: "La fe y la esperanza es lo último que se pierde. Nosotros somos los responsables".