Argentino de Rosario cayó en su cancha por 2 a 1 ante Ituzaingó, en el inicio de la segunda ronda de la Primera D. El Salaíto no supo definir en los momentos claves y lo terminó pagando caro en el último minuto de juego. Hubo calientes disturbios entre la barra y el plantel a la salida del partido.
Tras una positiva racha de ocho cotejos invicto como local, y luego del parate por la fecha libre de la que viene, el elenco de David Charles Pérez no jugó un buen partido y le terminó regalando los tres puntos a la visita.
En un primer tiempo chato, Argentino fue apenas superior al rival, exhibiendo mayor ímpetu y empuje, pero sin claridad de juego en el mediocampo. Superpobló la mitad de la cancha, y le faltó la puntada final, que sin embargo intentó incesantemente René Cabrera, el más movedizo y punzante.
Trascurrió la primera parte sin grandes emociones ni sobresaltos, a tal punto que la única peligrosa había sido el tiro libre de Arévalo sobre el final del mismo, que ya iba amenazando con su exquisita pegada.
En el complemento, levantó un poco el nivel Ituzaingó, pero sin hacer demasiados méritos como para merecer el triunfo. Aquí fue cuando se emparejó el encuentro, tornándose un ida y vuelta sin profundidad.
El ingreso de Cristian Rivarola, a los 55’, fue ampliamente favorable para el juego, ya que ofició de titiritero y manejó los hilos del local haciéndole crear algunas situaciones de gol desperdiciadas por sus inconexos y errantes delanteros.
Y como dice el dicho, "los goles que no se hacen en un arco, se padecen en el otro". Así abrió el marcador Cristian Bruno, tras una carambola en el área que nadie sacó, con un remate débil y tenue que entró pidiendo permiso por el palo izquierdo del buen De Caroli.
Con la bronca como combustible, Argentino se lanzó al ataque encontrándose con el empate tres minutos después, mediante un tiro libre magnífico de Nazareno Arévalo, de zurda y por afuera de la barrera.
Conforme con la floja actuación y el punto que conseguía, se fue diluyendo con el correr de los minutos y terminó encerrado en su cueva. Como consecuencia de esto, el avance visitante y la espectacular maniobra individual de Nelson Paz –de otro partido- en tiempo cumplido, se encontró con el golazo de la victoria que desató el abatimiento rosarino.
El pitazo final concluyó con un lamentable hecho de violencia en la interna de Argentino de Rosario. Se acusa un –inexplicable- apriete de la barra brava a jugadores y cuerpo técnico que llevó a agresiones verbales y físicas entre ambas partes.
Argentino (1): De Caroli; Monserrat, Arévalo y Tordini; Fabrizio, Mancilla, Terré, Merlo y Flores; Cabrera y Bochicchio. DT: David Charles Pérez.
Ituzaingó (2): Ferreiro; Achucarro, Mantovani, R. Gómez y Ledo; Silva, Ibáñez, Bevcar y Paredes; Bruno y Vombergar. DT: Damián Troncoso.
Goles: Cristian Bruno (I) a los 70’; Nazareno Arévalo (A) a los 73’; Nelson Paz (I) a los 90’.
Cambios: Araujo x Bevcar (I) a los 27’; Paz x Paredes (I) a los 45’; Reynoso x Bochicchio (A) a los 45’; Rivarola x Terré (A) a los 55’; Monzón x Merlo (A) a los 64’; Glitz x Bruno (I) a los 85’.
Amonestados: Bochicchio (A) a los 40’; Silva (I) a los 75’;
Estadio: José María Olaeta.
Árbitro: Hernán Dellacasa.
