El triunfazo ante Estudiantes de Caseros, calmó un poco el murmullo de críticas y cuestionamientos. Atlanta comenzaba el Torneo con una nueva desilusión, como comenzando a resignarse otra vez, en un torneo demasiado corto.
Y si bien Biggeri logró un eficaz funcionamiento en 2015 el equipo se desmanteló y rearmó, por lo que Aníbal requerirá un poco más de tiempo y paciencia para volver a encontrar un 11 de memoria y aceitar el juego.
El reciente 2-0 trajo aire fresco. Este martes por la mañana, el Bohemio retornó los entrenamientos en el predio de La Guapeada de Villa Madero.
No hay certezas, pero si indicios: se especula con que Biggeri repita la mayoría de los titulares. Podestá jugo un gran partido y podría conservar el puesto de lateral por derecha. Otermin, como central no tuvo mayores dolores de cabeza pero Verino también suma fichas para ser titular.
En el mediocampo, Tolosa mostró aptitudes interesantes aunque careció de socios claros. Podría ganarle el puesto a Cardozo, que no venía jugando bien.
Sin dudas, el que más presión mete es Luciano Pons. El delantero ex San Miguel fue figura del partido y además venía de jugar bien ante Español. Biggeri lo dejó en el banco ante Fénix y el pibe demostró sus condiciones y ganas.
Hay tiempo para mejorar pero no hay tiempo para perder puntos. Atlanta debe ganar al mismo tiempo que debe encontrar sus once apellidos titulares.
Se viene Morón y desde la preparación, Luciano Pons y Ezequiel Rodriguez se entrenaron junto a sus compañeros. Julián Barría, con esguince de rodilla, hizo kinesiología.
