Un emocionado David Muller contó las sensaciones después de marcar su primer gol como profesional. El sanfrancisqueño fue uno de los puntos altos en el equipo de Giaccone.
Comenzó el segundo tiempo, la pelota le cayó a David por el sector izquierdo. Escurridizo como es encaró para el centro, previa pared con su "compinche" JP Francia, controló y le quedó para la derecha (su pierna menos hábil) sacando un zapatazo que se metió en el ángulo del experimentado Laureano Tombolini.
Muller corrió unos metros y se agarró la cabeza, como no creyendo lo que había sucedido. Fue el primer gol del "pibe" que la viene remando sin pausas y que con la llegada de Ariel Giaccone logró la titularidad. "Muy emocionado ante todo, es lo más lindo que me podía pasar. Salir de las inferiores del club y convertir el primer gol profesional con Sportivo Belgrano es un logro muy importante para mí", le dijo a DSP.
De pocas palabras frente a los micrófonos, pero contundentes. El sanfrancisqueño venía estando cerca del gol y se le dio: "Uno intentaba hasta que se me dio, muy contento por cómo me salió. El equipo hizo un partido bárbaro, no merecimos ganar por solo un gol, sino que pudimos haber aumentado para estar más tranquilo. Siempre intentamos jugar por el piso y eso nos deja conformes".
A la hora de hablar de la jugada, el volante ofensivo zurdo hizo dudar a todos en las tribunas… ¿Es zurdo o derecho?, se preguntaron ante tamaño y certero remate de derecha: "Le pegué con la derecha porque me quedó así, la verdad que estoy muy contento y esto es para toda mi familia", explicó.
Automáticamente sus compañeros, todos, los fueron a buscar para abrazar. Era el primer gol del partido y con la necesidad de ganar si o si, pero en esa búsqueda hay algo más, David es muy querido dentro del plantel: "Estamos muy unidos, en este momento que no se nos están dando las cosas, es importante que estemos todos tirando para adelante. El apoyo de los jugadores es muy importante para mí, ellos siempre me hablan y me dan tranquilidad".
Sin dudas que la llegada de Giaccone como responsable técnico, le imprimió una cuota grande de confianza a Muller. Con Pancaldo prácticamente no sumaba minutos y de un día para el otro saltó a la titularidad, algo que lo viene justificando con creces: "Nos conocemos mucho con Ariel, sabe lo que le puedo rendir y yo sé que quiere el entrenador. Me da mucha tranquilidad la confianza que me da. Me felicitó por el partido que hicimos en lo grupal", concluyó.
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