Federal A - DOUGLAS HAIG

"No somos riñón, somos corazón de Douglas"

DOUGLAS HAIG, FEDERAL A, ROSSELLO, CANTONI, COPA ARGENTINA
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Luego del partido del lunes ante Lanús por la Copa Argentina en cancha de Defensa y Justicia, Rubén Rossello y Enrique Cantoni, DT y ayudante de campo, respectivamente, visitaron los estudios de Radio Uno y se expresaron abiertamente en La Gloria o Devoto. Tanto el "Negro" como el "Mono", dos glorias del rojinegro, se mostraron agradecidos por la oportunidad que tuvieron de dirigir a este grupo plagado de juveniles, de los cuales se sintieron identificados cuando a ellos les tocó debutar. Más allá de haber perdido por penales frente al Granate y realizar un partido estupendo, los ídolos del club sueñan con ser ratificados en el puesto y así ser el cuerpo técnico que esté al mando del próximo Federal A que arrancará en septiembre

José Rubén Rossello y Enrique Horacio Cantoni, tienen un nombre en Douglas, y por eso fueron convocados por la CD para dirigir el partido por la Copa Argentina ante Lanús el pasado lunes, en el que perdieron por penales luego de igualar 1 a 1 en el tiempo reglamentario: "Estamos abiertos. Mucha gente nos ha invitado a distintos lugares y la verdad que estamos muy contentos de volver a lo que fue nuestra segunda casa por 20 años. Estamos muy contentos con lo que nos pasó, disfrutando, porque en la vida uno pasa muchos sin sabores y esto se disfruta", empezó la charla el segundo.

Además, el "Mono" confesó la responsabilidad con que se tomaron el cotejo: "Pedíamos seriedad, respeto, concentración, porque nosotros también la teníamos en el hotel, pensábamos en el partido. Nosotros estábamos planificando cada uno de los movimientos, sabíamos que íbamos a tener un rival difícil como Lanús. Los chicos también entendieron esto. Del 1 al 20, inclusive Jero (Casadidio) con el problema de lesión, todos fueron magníficos", señaló.

El grupo de 20 players partió a Capital Federal el domingo, y el "Negro" recordó en algunos pasajes cuando a él le tocó pasar por la experiencia de la primera vez: "Le veíamos los ojitos a los chicos como miraban el hotel, y nos veíamos reflejados en ellos como cuando nosotros debutamos, cuando tuvimos nuestro primer viaje en avión", tiró, y su colaborador agregó: "Hay que hacer un poco de docencia también. Antes era distinto, ahora es entrená, arreglate, ya sabés lo que está bien, lo que está mal. Pero nosotros somos un poco de la vieja guardia y hay que estar atento cómo viven, cómo duermen, cómo se alimentan".

El desafío de estas dos glorias de la institución, no fue únicamente permanecer al mando de la plantilla, sino también en guiar a los juveniles: "Los grandes ya saben lo que estamos hablando, en cambio los chicos hay que llevarlos despacio. Yo los veía y nos agradecían, sobre todo a Rubén, y eso emociona. Parezco un tipo de personalidad fuerte pero las cosas me llegan", aseguró el ex marcador central.

Sobre consejos y órdenes de entrenadores en épocas de pantalones cortos, Rossello jura que nunca padeció los de ninguno que cruzó por su carrera: "Nunca me pasó, no era de pensar así de los técnicos, al contrario, los escuchaba mucho. Siempre dije que tuve grandes maestros y de cada uno saqué los mejor. Es por eso que hoy me siento seguro de lo que hago", indicó.

Consultados por qué esta oportunidad les llegó ahora y no antes, primero el polifuncional dio su parecer: "Nunca me pasó eso. Pienso que si no nos nombraban es por algo. Cuando no llegan las cosas es por algo, así que lo que me quedaba hacer era mejorar día a día", a lo que su amigo añadió: "Tuve la posibilidad de trabajar en Primera, me invitaron. A algunos de estos chicos los conozco de Séptima División, pero prioricé mi familia y cuando me ofrecieron trabajar opté por mi familia porque a mis nenas les faltaba algo, que era el papá. A una de ellas le iba mal en la escuela y se me caían las lágrimas, así que opté por mi familia".

Con vistas a futuro, el coach contó cómo sigue la historia: "Ahora depende de los dirigentes. Ellos nos dieron un partido, una linda oportunidad, y dimos todo, pero depende de ellos ahora. Queremos agradecer a los chicos por estos 15 días que trabajamos a full", manifestó.

Volviendo al compromiso con los de Ezequiel Carboni, el adiestrador táctico continúa lamentándose: "Nos faltó un poco de suerte. Planteamos un buen partido, hicimos las cosas bien, pudimos contrarrestar el juego de ellos. Ellos marcaban diferencia en jugadores y nivel pero supimos manejarlo y faltó la suerte en los penales", expresó.

En cambio, el defensor con más goles de la historia de la B Nacional, no se lamenta: "Soy un trabajador público. Hablé con un montón de gente en la calle en estos 15 días y nos deseaba suerte. El martes fui a trabajar y cada tanto paraba el colectivo de la Municipalidad, leía los mensajes y se me caían las lágrimas. Uno sabía la importancia del partido y se lo transmitimos a los jugadores. Nosotros no somos riñón, somos corazón de Douglas. Tuvimos profes como José Castañarez, Juan (Echecopar), Don Miguel (Ignomiriello), etc. Somos agradecidos de la vida, estamos en un momento sublime de la vida y sabemos que no depende de nosotros quedarnos. La última palabra la tiene la dirigencia", disparó.

En cuanto a los hinchas que se acercaron al Norberto Tomaghello de Florencia Varela un día laborable, desafiando el frío de la jornada, el ayudante de campo no sale de su asombro: "Fue impresionante ver esa gente, me emocioné. Fue una noche soñada y mágica, por el contexto y la gente que se acercó, fue maravilloso", reveló.

Aguardando y soñando la oficialización en el cargo de parte de la dirigencia de calle San Nicolás 44, ambos proyectan: "Hay un plantel equilibrado con jugadores jóvenes pero de mucha experiencia. Tenemos a Pablo Mazza, el gran capitán, un arquero que transmite seguridad a la defensa, y los refuerzos también ayudaron a ese equilibrio. Si viene alguno más lo vamos a elegir con lupa", dijo Rubén, en tanto que ex Estudiantes de Río Cuarto fue más allá: "Hay que elegir con lupa los jugadores. Acá todos tienen que dejar todo, no que solo vengan a cobrar o a pasar el año, sino a dejar todo por nuestro Douglas. Primero zafar del descenso y segundo llegar lo más arriba posible", pronunció.

En el cierre, Enrique habló de los objetivos que perseguirán, en caso de ser nombrados, con las entidades del fútbol pergaminense: "El desafío es que nos provean jugadores de la liga local, potenciarlos, enseñarles a dar el salto de una liga amateur al profesionalismo", concluyó.