Flandria le ganó 2 a 0 a Cañuelas como visitante con goles de Matias Nouet y Enzo Trinidad, se recuperó y se acomodó como escolta del torneo.
Cañuelas arrancó jugando mejor. Logró imponer su idea haciendo ancha la cancha, con un equipo corto y asfixiando con presión la salida rival. El buen manejo de la pelota y la convicción con la que salió a jugar el pleito le permitieron dominar rápidamente el encuentro porque Flandria, salió a esperarlo; muy replegado sobre su campo y con la presencia de Alejandro Cabral como sostén para rechazar y aguantar los intentos del local por ponerse en ventaja. Pero la falta de contundencia del Rojo, impidieron que ese gol llegara y justificara su buen andar. Por el contrario, afloró el arma de doble filo que es la ideología de juego planteada por su DT. Porque en una jugada aislada, Franco Tisera apareció en Flandria. El 10, frotó la lámpara hizo un jugadón y con magia penetró con un pase filtrado la defensa en línea y muy adelantada de Cañuelas para dejar solo a Matias Nouet, que definió con sutileza ante la salida del arquero y puso de manera inesperada arriba al Canario. Sin embargo pese al gol el partido fue igual. Cañuelas intentó ir por la igualdad pero se encontró con otro gol de Flandria en el camino, que siguió con la peligrosa idea, pero al parecer efectiva, de esperar a su rival. Nuevamente Franco Tisera acarició la pelota y con destello de crack, y con la misma fórmula, le puso un centro como con la mano a Enzo Trinidad que con un lindo cabezazo de pique al piso, aumentó distancias. El resultado dio pie al entretiempo, que desde el merecimiento era injusto, pero Flandria con Tisera, su batuta y compañía lo hicieron real. En el complemento el partido fue más parejo y como el local tuvo que salir a buscarlo, el cotejo se hizo más entretenido, de ida y vuelta y con varias chances de gol. Flandria, tranquilo con el resultado a su favor con creces, dejó que Cañuelas continuara proponiendo. Algo desconcertado pero sin resignar su idea, el local corrigió algunos detalles que le permitieron ser más vertical y crear chances más claras que las tímidas llegadas del primer tiempo. Igualmente pese a tener un cabezazo de Blas Tapparello que dio en el travesaño y un tiro de Mauro Frattini que besó el palo, se fue desinflando. A la visita le vinieron bien los cambios y tuvo alguna que otra oportunidad de aumentar ventajas pero se apoyó principalmente en sus centrales, que fueron su sostén para quedarse finalmente con el triunfo. Así fue final y Flandria se llevó un victoria no avalada por lo visto en cancha, pero hizo los goles que es lo importante y quedó como escolta del torneo. Mientras que Cañuelas hizo todo lo posible para no quedarse con las manos vacías pero pese a jugar lindo, no pudo transformar en goles sus intenciones, cayó en casa y sigue sin encontrar el rumbo. Cañuelas: Tomás Lingua Bender; Carlos Aguirre (62 Santiago Sosa), David Sueldo, Federico Gay, Lautaro Alvarez Costa; Mauro Frattini A, Daniel Ibañez A (85 Julian Cano), Luciano Cariaga, Gonzalo Rodriguez; Blas Tapparello (78 Tomás Alvarez), Diego Aguirre. DT: Martin Perelman. Suplentes: Augusto Vantomme, Ivan Fassione, Lautaro Olivera, Cristian Franco. Flandria: Juan Manuel Lungarzo; Andres Camacho, Carlos López Quinteros, Alejandro Cabral A, Nicolás Henry (62 Tobias Bovone); Matias Nouet (92 Francisco Nouet), Walter Lugo, Joaquin Ibañez, Enzo Trinidad (92 Julian Marchio); Franco Tisera (65 Hernan Altolaguirre), Mariano Guerreiro (Lautaro Gordillo A). DT: Andrés Montenegro. Suplentes: Germán Yacaruso, Julian Ford. Síntesis: Goles: 22 Matias Nouet (Fla), 41 Enzo Trinidad (Fla) Árbitro: Sebastian Bresba Mal arbitraje. Habló demasiado, cortó mucho el juego para dialogar con los jugadores en advertencias en lugar de amonestar. Y el criterio en esas ocasiones nunca fue claro. Las que fueron equivocaciones, luego las compensó para el rival. Igualmente su flojo partido no incidió en el resultado. Publico: A puertas cerradas (Protocolo Covid 19). Cancha: Cañuelas (regular).
