Lo jugó a morir, como se juegan los clásicos. Ganaba por tres goles, se quedó, sufrió, pero al final gritó victoria. Venció 4-3 a Independiente Rivadavia, así logró el primer triunfo de visitante y da pelea.
Pudo ser goleada, terminó pidiendo la hora. Pero ganó y es lo que importa. Lo mereció de principio a fin. Gritó en rodeo ajeno y se quedó con el clásico. Un triunfo que llegó en el momento que más lo necesitaba para creer que se puede. Superó 4-3 a Independiente Rivadavia en Mendoza y así obtuvo la primera victoria de visitante (la última en la B Nacional fue el 12 de junio de 2011 2-0 ante Patronato) en el torneo. San Martín no está muerto, vive y quiere seguir peleando por el ascenso. El miércoles tiene otra final ante Huracán y no la puede perder
El Verdinegro desde el vestuario se encontró con un gol importante desde lo anímico. Después de una serie de rebotes, Cristian Álvarez cayó al Gargantini con un zapatazo que se colgó en el ángulo. El Verdinegro se puso en ventaja rápidamente en el clásico. Pero San Martín no supo aprovechar la ventaja y le cedió la pelota a La Lepra, que herido y tocado en su orgullo lo fue arrinconando. San Martín aplicó una pausa en el partido y eso fue clave para frenar a Independiente Rivadavia, que no bajó el ritmo de ataque. Álvarez que estaba dulce, pudo aumentar, pero Ayala evitó ese grito sanjuanino. Independiente fue el dominador del juego y siempre encontró espacios a las espaldas de Michelli.
Álvarez, Poggi y Salas estuvieron encendidos y fueron los que le dieron movilidad y fútbol al conjunto del Vasco. El pibe Salas recuperó una pelota en la mitad de la cancha, aceleró y en el mano a mano con Ayala no pudo vencer las manos del arquero para gritar el segundo en Mendoza. San Martín mostró su mejor imagen de visitante, solo le faltó efectividad para no sufrir. El equipo de Trotta fue muy peligroso en las pelotas paradas y Agüero estuvo cerca de empatarlo. Y bueno tantos goles marró San Martín, que el mendocino llegó a la igualdad por intermedio de un cabezazo de Puchetta. Sin embargo el Verdinegro no sintió el impacto, fue a ganarlo y lo consiguió. Con hambre de gol apareció López para gritar el segundo y adueñarse del clásico, 2-1.
En el amanecer del complemento San Martín noqueó a La Lepra en pocos minutos. Primero fue un zurdazo de Michelli y luego una jugada colectiva que terminó en un golazo de Pérez. Pero esos dos goles fueron opacados por una mano de Mattia en el área. Pezzotta marcó penal y García descontó. Ese gol inyectó a Independiente, San Martín se metió atrás y esperó de contra. Una vez más un error defensivo terminó en gol mendocino. Ardente salió mal y Cardozo estampó un gol que lo dejó al borde del empate.
San Martín no supo cuidar la ventaja de tres goles y sufrió hasta el final. García sacó un remate, que besó el palo y luego del saque de Ardente, Pezzotta pitó el final y San Martín se alzó con una victoria doble, que lo deja soñar.
SÍNTESIS
INDEPENDIENTE RIVADAVIA (MZA.) (3):
Josué D. Ayala; Walter A. García, Ariel A. Agüero, Martín Pucheta, Lucas Parisi; Abel Peralta, Emiliano Fernández, Diego Tonetto, Jonathan E. Pérez; Rodrigo Gutiérrez, Diego A. González Vega.
Suplentes: Maximiliano Scapparoni, Javier Silva, Federico Guerra y Héctor Cardozo.
Cambios: 15'ST Diego Cardozo por Lucas Parisi, 30'ST Lucas Gamba por Emiliano Fernández y 41'ST Juan Moyano por Jonathan E. Pérez.
DT: Roberto Trotta
SAN MARTÍN (SJ.) (4):
Luis Ardente; Ezequiel Michelli, Juan F. Mattia, Deivis Barone, Lucas Kruspzky; Mauro Bogado, Cristian O. Alvarez, Ivan Perez, Federico Poggi; Pablo D. López, Lucas Salas.
Suplentes: Luciano Pocrnjic, Hugo G. Iriarte, Santiago A. Hoyos, Nicolás Pelaitay, Pablo Jofré, José N. Vizcarra, Gastón Caprari.
DT: Juan Manuel Azconzábal
Goles: 6'PT Cristian O. Alvarez (SM), 39'PT Martín Pucheta (IR), 46'PT Pablo D. López (SM); 6'ST Ezequiel Michelli (SM), 10'ST Iván Pérez (SM), 14'ST Walter A. García (IR) y 40' ST Diego Cardozo (IR).
Amonestaciones: 5'ST Walter A. García (IR), 17'ST Abel Peralta (IR) Y 20'ST Martín Pucheta (IR).
Figura: Iván Pérez (SM).
Árbitro: Sergio Pezzotta
Estadio Gargantini
