Con siete puntos de nueve que disputó, el equipo que dirige Godoy registra la segunda mejor performance de los últimos siete arranques de torneo.
Desde lo matemático, Juventud Antoniana registra un muy buen comienzo. Dos victorias y un empate ponen esta breve campaña como la segunda mejor de los últimos siete torneos.
Con el empate del sábado en Corrientes frente a Mandiyú, con dos jugadores menos, el santo mantuvo el invicto y la punta, gracias también a los triunfos previos frente a San Jorge de Tucumán (1-0) y Sportivo Patria (1-0), como local.
Y aunque no dejan de ser números fríos, el buen comienzo debe ser el impulso que se necesita para mejorar y crecer como equipo. Tampoco es determinante ya que, la mejor racha que tuvo Juventud en la campaña 2015 no terminó como se esperaba. Con el Beto Pascutti como DT el santo registró cinco victorias consecutivas, pero el ascenso de aquel campeonato fue para Talleres.
Distintos y peores fueron los comienzos anteriores. En la temporada 2011-12, logró solo dos puntos (empates con Central y Gimnasia, derrota con Unión). En el 2012-13 sumó tres unidades (empates con Guaraní, Libertad y Tiro), en el 2013-14, Juventud hizo cinco puntos (venció a San Martín, empató con Tiro y con Gimnasia); en el fugaz torneo del 2014 alcanzó cuatro puntos (perdió con Gimnasia, le ganó a Central Córdoba y empató con Zapla). Más tarde vino ese explosivo comienzo del 2015 (victorias sobre Américo Tesorieri, San Jorge y Zapla).
En 2016, sumó cuatro puntos (perdió con Gimnasia, empató con Aconquija y venció a Zapla) y en el aburrido último certamen sumó 6 unidades ( triunfos sobre Gimnasia y Concepción, derrota con Zapla).
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