Aún sigue el malestar en algunos jugadores de Independiente Rivadavia, luego de la derrota 1-0 de visitante ante Guillermo Brown de Puerto Madryn. Sin generar un buen juego, el que había mostrado en la fecha anterior ante Nueva Chicago, donde goleó 4-1 al conjunto de Mataderos, la Lepra "se vino abajo" cuando le convirtieron faltando cinco minutos para el final.
Este martes, luego de la práctica Azul, el defensor Yair Marín fue contundente a la hora de analizar el presente de su equipo.
"Es preocupante, porque más allá de que nos hayan convertido, no generamos. Tanto que nos pelotearon todo el partido, una iba a entrar. La verdad que fue un gol con mucha suerte, muy ortodoxo porque fue cayéndose. Estamos muy calientes porque otra vez viajamos al pedo, otra vez nos hicieron un gol desde el lateral y nosotros no le probamos el guante a Taborda. Pero hay que seguir trabajando y hay que mejorar muchísimo. Por ahí nos faltó actitud y convencimiento para sacar adelante el partido", detalló el jugador leproso a Radio Nihuil.
"Acá no hay misterio. Hay que sacarse la careta y decir la verdad. La gente lo vio y nosotros no podemos esconder nada. Sinceramente sentimos vergüenza, dimos una imagen muy pálida, peor que la de Río Cuarto. Hay que decirlo y enfrentar la realidad. Tenemos que tomar conciencia de que estamos en un club grande, que dejamos la vara muy alta en el torneo pasado y que esto te exige más. Hay que despertarnos un poquito más. Esperemos que no se repita más y que todos esperemos dónde estamos parados. Esto no es un club de barrio, es un club grande", sentenció el ex Gimnasia.
El próximo domingo, desde las 20 en el Gargantini ante Alvarado de Mar del Plata, Independiente Rivadavia buscará retomar la senda del triunfo.
