Hace 116 años, el 28 de Julio de 1904, nacía Ferro Carril Oeste, institución que a lo largo de su rica historia tuvo grandes entrenadores como Carlos Griguol, León Najnudel y Julio Velasco, fue dos veces campeón del fútbol argentino, forjó grandes ídolos con Cacho Saccardi como emblema, fue el primer campeón de la Liga Nacional de Basquet, se destacó en varias otras disciplinas deportivas y supo ser un club modelo en lo social.
Todo se originó aquel lejano 28 de Julio de comienzos del siglo pasado, cuando en el barrio porteño de Caballito 95 empleados de la compañía Ferrocarril Oeste de Buenos Aires –de ahí su nombre-, la mayoría de ellos de nacionalidad inglesa, decidieron crear un club que con el tiempo ganaría reconocimiento y prestigio. No tardaron mucho en adoptar su tradicional color verde. Tras un par de casacas ocasionales, ya en 1912 se empezó a vestir de verde, color que simbolizaba la esperanza y también característico de las casas quintas del barrio llenas de árboles y verduras, aunque no faltan quienes atribuyen la adopción del verdolaga a la colonia de irlandeses de la zona o incluso a la bandera ferroviaria de paso.
El fútbol es su principal disciplina, la que más moviliza y despierta pasión. Pero también forma parte de la élite en otros deportes grupales, masculinos y femeninos, como basquet, voleibol y handball, a los que se debe agregar hockey sobre césped, béisbol y otros deportes individuales, entre ellos tenis, natación y atletismo. Baste mencionar, en esta última disciplina, la figura de Juan Carlos Zabala, medalla de oro en maratón en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles de 1932.
En basquet Ferro es un grande de verdad. Siguen a continuación algunos pocos datos para corroborarlo. En 1985 fue el primer campeón de la Liga Nacional de Basquet creada por el visionario entrenador León Najnudel. Fue también el primer bicampeón, al repetir el título en 1986. Ganó en total 3 Ligas Nacionales y una Copa Argentina. Fue el primer club argentino consagrado como Campeón Sudamericano en 1981 y repitió como bicampeón el año siguiente, siendo el más ganador a nivel continental, junto a Boca Juniors, con 3 conquistas. Fue subcampeón de la Copa Intercontinental FIBA en 1986. Figuras de la talla de Luis Scola, Miguel Cortijo, Federico Susbielles, Javier Maretto, Sebastián Uranga, Gabriel Darrás, Martín Leiva, Luis González, Luis Oroño, Diego Maggi y Federico Kammerichs, entre tantos otros, engalanaron las noches del gimnasio "Héctor Etchart", donde se escucharon las indicaciones llenas de pasión del gran León.
En el vóley de Ferro dio sus primeros pasos como entrenador, allá por fines de los ’70 y comienzo de los ’80, el gran Julio Velasco, que tuvo una carrera con un palmarés impresionante. Antes de emigrar a Europa, en Caballito logró varios Campeonatos de Primera División consecutivos, a comienzo de los ‘80, con jugadores inolvidables como Hugo Conte, Waldo Kantor, Esteban Martínez, Carlos Getzelevich y Daniel Castellani. También fue parte del primer gran logro del vóley celeste y blanco, al obtener la Medalla de Bronce en el Mundial Argentina 1982, como entrenador asistente del coreano Young Wan Sohn. Luego Velasco fue reconocido por la FIVB como el mejor técnico del siglo XX, tras ser multicampeón a nivel de clubes en Italia (con 4 Campeonatos de Italia y 2 Copas de Italia) y dirigir a las selecciones nacionales de Argentina, Italia (ganó 2 veces el Campeonato Mundial, 5 veces la Liga Mundial, 3 veces el Campeonato Europeo y obtuvo la Medalla de Plata en los JJOO de Atlanta ’96), España, Irán y República Checa.
También en la rama femenina el vóley de Ferro registra varios títulos en su haber, al igual que en handball, deporte en el que cosechó numerosos campeonatos argentinos y sudamericanos con sus equipos de varones y mujeres. El futsal, el béisbol, el ajedrez, la natación y el tenis, además del hockey sobre césped, también tuvieron y tienen a Ferro entre sus protagonistas. Sin olvidar al fútbol femenino, de reciente formación, y que compite en la segunda categoría de A.F.A.
Pero es el fútbol masculino lo que nos atañe en esta página de Mundo Ascenso. Y es muy rica su historia, más allá del presente que lo encuentra peleando por retornar a la máxima categoría. El fútbol fue su primer deporte oficial, junto con el cricquet. Con estadio propio desde 1905, se afilió rápidamente a la Asociación de Fútbol que regía en aquel momento y disputó su primer partido versus River Plate, en 1907. Fue uno de los 18 clubes fundadores de la Liga Argentina de Football y por tal motivo participó en el fútbol profesional desde la instauración del mismo en el año 1931, venciendo en su debut a Argentinos Juniors por 2 a 0. La actual situación no debe llamar a engaños ya que Oeste es uno de los grandes del fútbol argentino: participó en Primera División en 80 temporadas y ocupa el puesto 14 en la tabla histórica general.
La primera década del profesionalismo, la de los años ’30, la transcurrió por mitad de tabla y con virtuosos jugadores, con juveniles como Bernardo Gandulla, Raúl Emeal, Jaime Sarlaga y Juan José Maril, que pronto emigraron para ser figuras en los clubes grandes. También el ídolo boquense José "Perico" Marante tuvo un paso por Caballito.
La década del ’40 lo vio a Ferro navegar por la parte baja de las tablas, con la presencia del rápido goleador paraguayo Delfín Benítez Cáceres y los retornos de Gandulla, Emeal y Maril, culminando con el primer descenso en 1946 para retornar a Primera dos años después.
Durante los ’50, con un gran desarrollo en lo social, "Oé" tuvo altibajos en lo futbolístico. Así, descendió en 1957 (primera vez que se usaron los promedios, entonces de 2 años), para retornar de inmediato el año siguiente y concretar una gran campaña en 1959, cuando logró el cuarto puesto y acumuló 16 partidos consecutivos sin perder. Un gran equipo, con presencias destacadas como las de los luego ídolos de Boca y seleccionados nacionales en Inglaterra ’66 Antonio Roma y Silvio Marzolini, como así también Héctor Berón, Dante "Mandrake" Lugo y Antonio Garabal.
Los años ’60 mostraron otro descenso (1962) con ascenso inmediato (1963), la asunción como Presidente de Santiago Leyden en 1963 y otro cuarto puesto en 1965, con Roque Marrapodi, Alberto Mogaburu, el "Ratón" José Leonardi, Felipe Ribaudo, Miguel Angel Tojo, Berón y Garabal.
La década del ’70 fue de un gran desarrollo societario y mostró como hitos destacados la inauguración del emblemático gimnasio "Héctor Etchart" en 1972 y la aparición de un canterano como Gerónimo "Cacho" Saccardi, quien con el tiempo se convertiría en el máximo ídolo, merecedor de un bronce en la entrada de la confitería del club de Caballito. También se disfrutaron las presencias del "Burro" Juan Domingo Rocchia, el "Goma" Carlos Alberto Vidal, los hermanos Carlos y Héctor Arregui y la aparición de los jóvenes Héctor Cúper, Oscar Garré (campeón mundial con Argentina en México ’86) y Claudio Crocco. Se venía formando el gran equipo que explotaría con la llegada de Carlos Timoteo Griguol como entrenador en 1979.
Y llegaron los dorados años ’80. De la mano de Timoteo, Oeste obtuvo dos subcampeonatos seguidos en 1981 (Metropolitano y Nacional). Estaba madurando la primera estrella y ésta llegó en el Nacional 1982, con una racha invicta de 22 encuentros y venciendo a Quilmes en la final a 2 partidos con un acumulado de 2x0. Volvió a consagrarse campeón en el Nacional ’84, venciendo a River Plate en los 2 cotejos de la final, 1x0 de local y goleando 3x0 en el Monumental. El arquero record Carlos Barisio (1075 minutos sin recibir goles en 1981, marca que aún no fue superada), Roberto Mario Gómez, Víctor Marchesini, el uruguayo Julio César Giménez, el paraguayo Adolfino "Fino" Cañete, Miguel Ángel Juárez, Oscar Acosta y Alberto "Beto" Márcico se agregaron a la base anterior para conformar dos equipos campeones casi invencibles. Esta época gloriosa se daba en paralelo con un gran arraigo social y crecimiento institucional, llegando a los 50.000 socios en el año 1987. Como corolario, en 1988 Ferro recibió el Premio UNESCO a la excelencia deportiva.
Pasaron los buenos viejos tiempos y, ya en los años ’90, comenzó el declive en todos los aspectos, desembocando en la crisis futbolística tras la ida de Griguol, en 1992, luego de su segundo ciclo. Pese a seguir surgiendo jugadores de su semillero que llegaron a vestir la camiseta nacional, como Sergio Vázquez, Germán "Mono" Burgos o Roberto "Ratón" Ayala, y otros muy queridos por los hinchas como el "Colorado" Facundo Sava y el "Gordo" Jorge Cordon (actual DT), el club descendió en 2000 y nunca más pudo retornar a la máxima división del fútbol argentino, pese a que desde el ascenso promovió figuras como Federico Fazio, Julio Buffarini o el "Huevo" Marcos Acuña.
La máxima tristeza fue la quiebra decretada en 2002, seguida por una oscura intervención judicial que duró 12 largos años, hasta que en 2.014 Oeste fue recuperado por sus socios al levantar la quiebra y poner fin a un período aciago de su historia.
Entre sus instalaciones destaca su estadio de fútbol, denominado "Arquitecto Ricardo Etcheverri", ubicado en las instalaciones del club en Avellaneda y Martín de Gainza. Además de finales del fútbol argentino y vueltas olímpicas teñidas de verde, también fue escenario de grandes partidos de rugby de Los Pumas, como asimismo recitales de inmensas figuras populares como Mercedes Sosa, Charly García y grupos internacionales de rock. Junto con el estadio de fútbol, en el mismo predio porteño se encuentra el gimnasio Héctor Etchart, un nuevo gimnasio polideportivo, canchas de césped sintético para fútbol de divisiones juveniles, canchas de hockey, de tenis, etc. Y se agrega un hermoso predio de 16 hectáreas en la localidad bonaerense de Pontevedra, con varias canchas de fútbol, si olvidarnos de un colegio primario con orientación deportiva.
Hoy cumple Ferro 116 años de historia. Se trata de un aniversario distinto, por las particulares circunstancias que estamos viviendo a causa de la pandemia del COVID 19. Una historia forjada por éxitos y grandes nombres, con la trilogía dorada conformada por Carlos Timoteo Griguol, León Najnudel y Julio Velasco y con figuras estelares en fútbol, basquet, vóley, atletismo y en todas las disciplinas deportivas en las que compitió en tantos años.
Ubicado estratégicamente en el corazón de Caballito, su casa de siempre, el centro geográfico de la ciudad de Buenos Aires, Ferrocarril Oeste avisora el futuro con la esperanza de volver a vivir sus tiempos de esplendor, esperanza reflejada en el color verde de su hermosa casaca.
Vamos Ferro, a seguir construyendo historia!!!
