Federal A - ALVARADO

De la ilusión a la desazón y nuevamente el sueño del ascenso

Fuente:

El 2017 fue un año con altibajos para Alvarado, que lo arrancó bien arriba con la vuelta a casa de uno de los grandes ídolos, Gustavo Noto, al banco de suplentes, con la esperanza de repetir lo hecho en 2012 y llevar al club de sus amores al ascenso. Sin embargo, ese regreso se ensució demasiado rápido a cuatro días de iniciado el año, cuando en la presentación del DT en la sede de Jara y Peña, lo que era una fiesta terminó en un hecho policial, con un herido de bala y el terror que se apoderó de todos los presentes, entre los que estaba el vicepresidente segundo, el Diputado Nacional Facundo Moyano.

Lejos de rendirse, la Comisión Directiva no se entregó a los violentos, los enfrentó, los llevó a la justicia y se enfocó en lo deportivo. Pero todo el trabajo realizado y el excelente nivel mostrado en la pretemporada se fue diluyendo en los días previos al reinicio del Torneo Federal A que se demoró más de un mes. Y encima, en el debut en el nonagonal en Carlos Casares, lo que podía haber sido un envión para ir por la clasificación al Pentagonal, terminó siendo una pesadilla. Alvarado ganaba cómodo 2 a 0 a 12' del final del partido y se volvió a Mar del Plata con un 2-3 que golpeó para siempre en autoestima y la confianza de un plantel que ya no se pudo recuperar.

Más allá que Noto hizo hincapié en lo anímico y redobló esfuerzos en lo futbolístico, nunca salió adelante. El equipo no salió de esa curva descendente y tras apenas siete partidos, con cinco derrotas y dos empates, el que llegó para quedarse a vivir presentó su renuncia indeclinable, fuera de la lucha en el Federal A y eliminado rápidamente de Copa Argentina. El tramo final del certamen los encontró a Gustavo Gatti y Osvaldo Nartallo y con la llegada de Mauricio Giganti casi se logra la hazaña de remontar la serie frente a Villa Mitre en Bahía Blanca, pero los penales se encargaron de ponerlo en su lugar y el "torito" cerró su participación con más pena que gloria.

Para la segunda mitad de año hubo borrón y cuenta nueva. El exentrenador de Ferro de Pico hizo "limpieza", apenas quedaron 5 jugadores de la temporada anterior y armó un plantel a su gusto para encarar el Federal A 2017/18. Y el equipo estuvo a la altura, se mantuvo durante toda la primera fase en puestos de clasificación, tuvo rendimientos altos, lagunas lógicas de la seguidilla de encuentros y terminó ganando los últimos dos partidos para finalizar en lo más alto de la tabla de posiciones de la Zona 1, alimentando la ilusión de su gente que cree que "este es el año" para dar el salto de una vez por todas a la Primera B Nacional.

El sueño está en marcha. El objetivo de tanto tiempo está a sólo doce partidos. Parece fácil, pero no lo es. Hay 17 equipos más con el mismo objetivo, y después serán cinco los que irán por ese primer ascenso. Si no se da, habrá una chance más, por un camino más largo, más espinoso. Por uno o por otro, más allá de que el crecimiento institucional que ha logrado Alvarado está por encima de cualquier resultado deportivo, el "torito" irá en búsqueda de la historia grande.