En los antonianos, entre el llamado a asamblea, se toma en cuenta las probabilidades de ascenso de Gimnasia y Tiro y la poca ayuda oficial que podría llegar para el próximo torneo.
Cuando Pepe Muratore dio a conocer la convocatoria para el llamado a la asamblea ordinaria del Centro Juventud Antoniana, no habiendo cumplido aún los dos años de mandato, tal como establece el estatuto de la institución para la renovación de autoridades, desde ese momento entró a tallar una serie de conjeturas entre los socios y exdirigentes, quienes mostraron interés en armar una lista para participar en las elecciones de donde saldrían las nuevas autoridades del club.
Juventud viene de notorios fracasos futbolísticos, luego del descenso que se produjo de la B Nacional en 2006, con el golpe más fuerte que significo la rápida eliminación del torneo Federal A. En la actual temporada se llegó a un compás de espera. Eso sí, se puso a consideración de un análisis más profundo en saber si a qué se apostará. Y todo conlleva a establecer un parámetro específicamente desde la posición de Gimnasia y Tiro, que sigue en competencia y bajo dos consignas: la permanencia en la categoría, la probabilidad del segundo ascenso o bien una invitación para jugar en la categoría superior.
20 de julio: Es la fecha tentativa para el llamado a asamblea en el club antoniano, para la renovación de autoridades
Lo que por lo bajo se comenta en Juventud y hasta se escuchó decir es que si el albo sigue en el Federal A, el reparto por la ayuda económica de parte del Gobierno provincial continuará en partes iguales; pero ahora si el equipo milllonario llega a la B Nacional todo el respaldo financiero, no solo estatal sino también de manos privadas, o la mayor parte se volcará a la Vicente López.
Entonces, desde la Lerma y San Luis, la especulación toma una forma en función de que domingo a domingo va dejando la presentación del albo en la fase reválida del Federal A.
Ese silencio que acompaña a Juventud trastoca un poco los planes porque se espera la decisión final de Pepe Muratore, por el hecho de confirmar, definitivamente, si se queda o se va, como ya lo anticipó el propio titular antoniano, teniendo en cuenta del interés de los mismos socios en resolver cuestiones inherentes a la institución, si es que agarran las riendas del club, apelando al ingenio para generar recursos en medio de una cruda realidad. Incluso, los rumores constantes de una invitación del club millonario para jugar la B Nacional, a través de la reestructuración, amplía los interrogantes en el santo con respecto a los pasos a seguir.
Si de una forma u otra Gimnasia y Tiro consigue alcanzar la meta de volver a jugar en la B Nacional, repercutiría enormemente en la reformulación antoniana sobre una estrategia de trabajo. Y hasta el mismo Muratore se sentirá tocado, hasta herido ¿Seguirá? Y Juventud, como institución, en medio de tantas pálidas requiere de una transformación para abandonar el estado de dudas sobre el rumbo al que se va a dirigir.
Es un compendio de ideas que se teje en el pensamiento de los antonianos, el desafío es en buscar soluciones coherente, fijando una posición para salir de una crisis que permita restablecer prioridades.
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