Gimnasia necesita arrancar derecho en casa. Además tiene una espina pendiente con el rival que lo mandó al descenso hace ocho años. Los registros históricos, esos que hoy -afortunadamente- duermen herméticos y llenos de polvo en algún archivo, indican a aquella fatídica primera quincena de abril de 2005 como la fecha más triste de la historia gloriosa y centenaria de Gimnasia y Tiro en el ámbito futbolístico. Aquella vez, un albo devaluado, en quiebra, con un plomizo medio lustro de fideicomiso encima y aún con el delirio de grandeza que hacía más catastrófica cualquier caída, descendía a los infiernos de un Argentino B del cual no consiguió salir a lo largo de seis interminables años. Aquella vez, con los sublimes ascensos a primera división reducidos sólo a cenizas y recuerdos, con un contexto totalmente distinto, sombrío y desesperanzador en la faz institucional y también en materia fútbol, el 3 de abril de 2005, un albo totalmente devaluado visitaba a un modesto Gimnasia y Esgrima de Concepción que le propinó la cachetada más dolorosa que se podía imaginar: un 8 a 0 que quedará grabado como el trago más amargo y que condenó a Gimnasia a la cuarta categoría. Una semana después, un empate sin goles en Salta condenaba al millonario a la estrepitosa caída anunciada de la pérdida de su lugar en el Argentino A. Enzo Noir, hoy en Central Norte, paradójicamente, fue verdugo del albo en esa goleada marcando dos tantos, mientras que Federico Rodríguez es hoy el único sobreviviente en el club de aquella época difícil. Hoy, ocho años después, la historia es diferente: el panorama está más claro, en lo futbolístico e institucional, y la chance de volver al Nacional B vuelve a ser palpable. En ese contexto, Riggio y su plantel saldrán el domingo a vengar aquella sangre derramada y a empezar a surcar un camino empinado. En ese afán, el Tano paró ayer a sus hipotéticos titulares, con Javier Liendo en lugar de Osvaldo Young y con Henry Sáez para acompañar a Iván Agudiak en la delantera. La única duda es Ivo Chaves o Maxi Gómez en el carril derecho. El juvenil será probado hoy a fondo para ver si está en condiciones de retornar luego de tres meses de ausencia. Síntomas positivos cambian el semblante Las cosas en Gimnasia y Tiro parecen ir esclareciéndose con el transcurrir de los días, teniendo en cuenta que hasta hace una semana el panorama en relación a las lesiones se tornaba más sombrío e incierto. Si bien el DT Víctor Riggio no podrá contar con todo su plantel en la primera fecha, los soldados afectados se irán sumando a medida que la competencia vaya tomando forma: Osvaldo Young recibió con beneplácito sus estudios en relación a la lesión que lo aquejaba y se descartó gravedad. El volante sufre una distensión de ligamentos leve en su rodilla derecha que no le impedirá volver para la segunda fecha en Olavarría. Mientras que Franco Ascencio, afectado por una contractura, volvió a sumar minutos y podría tener el domingo una chance entre los relevos. A esto hay que sumarle la recuperación de Ivo Chaves y la posible recuperación plena de Leandro Zárate y Esteban Burgos para la tercera fecha, estimativamente. Y la vuelta al ruedo del delantero Diego Coria. Por su parte, como contrapartida, el lobo entrerriano llegará a Salta con casi todo definido. Orcellet; Giovenale, Vendakis, Tissera y Juárez; Sánchez, Aquino, Delmastro y Domenez; Besel y Umpierrez serán los once de Hilario Bravi. Una buena noticia para los bolsillos El lastre de comienzos de mes y la pesada carga de la economía actual confabulará esta vez a favor de los bolsillos de los hinchas de Gimnasia y Tiro, que está deseoso y con tantas ansias desde hace un buen tiempo por ver a su equipo a la hora de la verdad, en el endecagonal final por el ascenso directo. También en el afán de ver el domingo un Gigante del Norte desbordante y con una nutrida concurrencia en el debut ante el lobo entrerriano, la dirigencia del club millonario tomó la determinación de mantener los precios de las entradas en los mismos niveles con respecto a los partidos que venía jugando el equipo por la fase regular. Las localidades comenzarán a venderse el mismo domingo a primera hora. Los precios: Bandeja Leguizamón $ 45; ex- Virrey Toledo $ 55; Platea Baja $ 55, Damas, Jubilados y Menores $ 30; Platea Alta $ 75, Damas, Jubilados y Menor $ 60. Benévolos El Consejo Federal sancionó a Federico Rodríguez con una fecha de suspensión luego de su expulsión ante Tiro Federal, en Rosario, en la última fecha de la fase regular. El Bocha podrá volver a estar a disposición de Riggio para la visita de la próxima semana a Racing de Olavarría. Por otra parte, el tucumano Pedro Argañaraz será el encargado de impartir justicia el domingo en el choque entre el albo y el lobo entrerriano.
