Gimnasia y Tiro sumó un valioso punto al empatar de visitante, 2 a 2, ante Racing de Olavarría. Fue la segunda igualdad en forma consecutiva del conjunto del Tano Riggio, en sendas presentaciones en el endecagonal final. Le costó al millonario tomar el control del juego. En los primeros minuto Racing estuvo más cerca del arco defendido por Juan Cruz Mulieri: porque en primera instancia el Gordo Altamarino remató por arriba del travesaño y luego Juan Berdún no pudo conectar con todo el arco a sus disposición. Cuando el albo estaba logrando hacer pie en el campo de juego se encontró con una ventaja a favor a través de Iván Agudiak, quien dominó el balón con el pecho y sacó un derechazo que se metió abajo en el arco de Racing. La alegría salteña no duró mucho, porque en un pelotazo Francisco Vasoler se encontró en posición inmejorable, no perdonó y puso el 1 a 1. El partido se hizo de ida y vuelta. Cobró intensidad. Racing buscó conectar con acierto cada avance; mientras que Gimnasia y Tiro, vía Agudiak, llevaba peligro a la valla defendida por Martín Mocorea. No varió mucho el inicio del complemento, aunque la visita retrocedió uno metros y apostó más a la contra. El encuentro ingresó al terreno de las imprecisiones, pero dejaba una ventana abierta para que el equipo salteño pudiera desnivelar el marcador. Maxi Gómez encaró por derecha, lanzó el centro y ninguno de sus compañeros de ataque pudo conectar. En la contra, Francisco Vasoler se encontró frente a Mulieri, que le ganó en el mano a mano. En la siguiente acción la pelota le quedó para el Gordo Altamarino, que desbordó por derecha y metió el pase para que Ramiro Jorge de media tijera conectó al gol. Riggio se jugó por hombres de refresco con Guglielmi y la Chancha Zárate, y el albo se fue con todo hacia Mocorea, y en la última incursión Matías Guglielme marcó el 2 a 2 definitivo.
