Primera Nacional - NUEVA CHICAGO

Gomito, tercera parte: Vuelta a casa

En esta tercera entrega, repasamos su vuelta al país y a Chicago después de 9 años. El ídolo regresaba y comenzaba a pagar con creces, el ascenso ante Chaca y la preparación del 2014, el año donde cumplió su sueño: "Vengo a llevar a Chicago a Primera".

Ya parecía difícil. Ya muchos no creían poder volver a verlo. Otros se lamentaban porque no lo podrían ver en acción con la verdinegra en su corta vida. Es que los años iban pasando, la edad avanzaba, la situación del club no era la mejor, y cada cierre de temporada en Estados Unidos se miraba de reojo su vínculo.
Es que habían pasado 9 años desde el último partido con la de Chicago, y 7 años desde que se fue del país. Tras su salida del "Torito" en 2002 regresó a Independiente donde saló campeón con el "Tolo" Gallego, pero después con poca participación, pasó a préstamo a Arsenal donde jugó todo el año. Y tras quedar libre al final del torneo, tuvo una oferta importante de la incipiente liga de los Estados Unidos, más precisamente del DC United, en ese momento de los equipos más importantes. Allí jugó tres años en altísimo nivel, saliendo campeón, siendo elegido el mejor jugador de la Liga, jugando el Juego de las Estrellas, compartiendo equipo con Beckham por ejemplo, y llevando a su equipo hasta la semifinal de la Sudamericana, de la cual fue invitado. Cada año bueno de "Gomito" allá era festejado acá pero a la vez le achicaba la posibilidad de retorno. Pasó también por el Colorado Rapids, volvió al DC y cuando parecía que se daba, que podía volver, de hecho fue recibido por cientos de hinchas en el Aeropuerto pidiendo su regreso, siguió allá jugando en el Miami FC de la 2da división. Él decía, quiero volver óptimo, sino prefiero no hacerlo. Pero su vínculo con el Miami terminó a mediados del 2011 y nuevamente se encendieron las alarmas en Mataderos. Muchos dudaban, casi 37 años, y más crecieron las chances cuando volvió al país y decidió no jugar más en el norte. La dirigencia de ese momento encabezada por Gustavo Lacana y sobre todo a instancias del vice Pablo Caruso, empezaron las negociaciones. Chicago hacía 3 años que deambulaba por la B Metro sin poder salir, venía de perder la final del reducido por la promoción ante Defensores y el sueño del retorno a la B Nacional estaba en marcha. Continuaba Mario Finarolli a cargo del plantel. Y finalmente, "Gomito" llegó a un acuerdo y estampó su regreso. Un regreso que nadie sabía cómo iba a encontrarlo, si iba a jugar siempre, si iba a alternar, si físicamente iba a dar ventajas, si sólo era por ese año. Él se sabía óptimo, como dijo, no quiero volver porque sí. Pero creo que nadie, ni siquiera él, imaginaba que ese retorno sería por 8 años, con una plenitud enorme y envidiable, con mayor capacidad de juego, con el gol siempre a mano, con la sabiduría de los años, y en cada uno de esos 8 años, siendo la figura del equipo, y en muchos casos del campeonato. Es más, volvió por un sueño, regresar a Chicago a Primera y jugar allí, y lo cumplió, tres ascensos en total, quebró la marca de mayor cantidad de partidos jugados, superó los 100 goles y se ubicó 3ro en esa lista. Agrandó su idolatría y su figura, lo amaron más los que antes lo disfrutaron, se convencieron los viejos hinchas que es el más importante de la historia, y lo apreciaron los nuevos, los chiquitos y los no tanto pero que no lo habían visto jugar.
Pero vamos por parte. Firmó, se unió al plantel, se encontró con Serrano, un viejo conocido, compartió migas con Testa, ídolo en su ausencia, y se fue preparando. Se puso a tono en lo físico y recién cuando estuvo pleno, Finarolli lo convocó. Fue en la 9na fecha de local ante Flandria entrando desde el banco con la nro. 13 (la misma con la que debutó) el 24 de septiembre. Chicago ganó 1 a 0 (gol de Eduardo Berón) y su DT, cuestionado, tomó aire; aunque dos derrotas seguidas, una por Copa Argentina ante Lamadrid, hicieron que deje el cargo. Muy encima se venía el partido ante Italiano de local, y se apostó como interino por el DT de las inferiores, Mario Franceschini, goleador y figura del campeón del 81, tal como lo habían sido Traverso y Vega, entrenadores del ascenso en el 2001. Y en ese partido ante Italiano, el 10 del 10, anotó su primer gol desde su vuelta el 10, Gomito anotó el único tanto del 1-1 final. Luego una derrota ante Comunicaciones hizo que la dirigencia se mueva buscando un DT, pero antes de quedar libre, el "Torito" le ganó a Colegiales y con días para pensar, con elecciones encima donde el oficialismo no se presentaba, se decidió seguir hasta fin de año con Franceschini para no dejar un contrato reciente a la Comisión entrante. Y salió bien, porque esos 15 días libres sirvieron para que el DT, también como en el 2001, encontrara el equipo. Con un Gomito ya pleno, en esa recta final de 18 puntos sacó 16, incluido el clásico con Morón. Claro, ya la expectativa era otra y con la continuidad asegurada del técnico, arrancó el 2012 expectante. Y en ese 2012, Gomito empezó a pagar su promesa. El equipo siguió en alza, entró cómodo al reducido donde era gran candidato. Hizo pesar su candidatura, aplastó a Los Andes y Platense, dejó en el camino al duro Acassuso en la final, y llegó a la Promoción, nada más ni nada menos que ante Chacarita. Creo que esa promoción no necesita presentación, todos la recuerdan. Con Gomito como figura, ganó en casa 1-0, gol de Carboni, y tres días más tarde fue a San Martín, donde tenía que no perder. El resto es historia conocida, gol de Carboni al final, empate de Chaca a los 46 y el ya famoso penal de Toledo ante Monllor a los 50, en la última de la tarde, con el Tano Pasini confundido gritando gol y con el delirio de los jugadores de Chicago que en casa de un rival, volvían 4 años después a la B Nacional, de la mano del ídolo que regresó meses antes y que nadie sabía cómo iba a responder, y fue el segundo goleador del equipo con 9 goles.
No fue fácil el retorno a la B Nacional. Se equivocaron en decisiones claves en el mes que no se debe fallar, Julio, donde se arma el plantel. Chicago arrancó último ese torneo y nunca despegó de ese lugar. Pasó Franceschini, quiso enderezar el rumbo Ángel Bernuncio, que empezó bien pero terminó muy mal, y con la cosa juzgada, René Kloker terminó siendo el DT interino en la recta final, cuando el descenso era más que una realidad. Nada pudo hacer Christian para evitarlo, más allá de que fue el goleador del equipo con 9 goles.
El torneo 2013/14 lo encontraba nuevamente a Chicago en la B Metro, y Gomito ratificaba su continuidad. Ya en ese momento cada junio era de mucha importancia para saber si el ídolo con casi 39 años, seguía o dejaba el fútbol. Pero claro, estaba más pleno que nunca y era el mejor del plantel, con lo cual sus ganas y el deseo de la gente, hacían junio a junio que siguiera. Para tratar de volver lo más pronto posible, la dirigencia llamó a un viejo conocido, Mario Finarolli. Aparecieron jóvenes como Melo, Fattori, volvió Bochi de su paso por Gimnasia, y el entrenador trajo jugadores de su conocimiento.
Arrancó bien, ganando, sin perder varias fechas y peleando arriba aunque sin convencer. En la fecha 9, el 21 de septiembre, ante Acassuso, con victoria 2-1 (un gol suyo), Gomito alcanzó los 300 partidos, ya siendo el 2do de la historia y ya previendo superar a Loyarte que con 338 era el hombre record. Recién en la fecha 14 iba a perder el invicto ante Almagro, pero a partir de allí, 4 de 15 sentenciaron a Finarolli. El equipo cayó en la tabla, en juego y se quedó sin DT. Faltaban sólo tres fechas y la danza de nombres rondaba. Pero se apostó a terminar el año por esas tres fechas con el de inferiores como interino (¿les suena similar a otros torneos?). Y ahí fue que Pablo Adrián Guede, otrora compañero de ataque de Gomito en el 96, y recién llegado de España con ideas innovadoras, se hizo cargo. Perdió con Tristán Suárez el primer partido y lo miraron de reojo, y el equipo en mitad de tabla y lejos de la punta. Pero antes del receso, le ganó a Colegiales y a Comu, en gran forma. Eso hizo que sea ratificado en el cargo para encarar el 2014…Pero el 2014 es otra historia aparte, que seguirá mañana, en estas notas donde repasamos los años de Gomito en Mataderos, antes de la obra final, el sábado 17.05 horas ante Atlanta.