Carlos César Sperdutti le dedicó su vida entera al Deportivo Maipú. Es su segunda casa. Primero se desempeñó como jugador desde los 11 años y luego como entrenador, profesión que la inició en el '89. No hay forma de imaginar al Deportivo Maipú sin Carlos César Sperdutti en el banco de suplentes. Desde el 2002 que está en el Cruzado.
"En el '84 tuve una lesión grave en la rodilla, me diagnosticaron desgaste articular y no pude jugar más, por eso me dedique a la dirección técnica. Primero arranqué como ayudante de campo con Hardan Curi, Carlos Montagnoli y Pedro Palazzo. Después me largué solo", contó el Gringo a Ovación.
"En el '89 arranqué como entrenador en Las Paredes. Trabajaba a la mañana en YPF y a la tarde viajaba a San Rafael. A la 1 de la mañana volvía y a las 5 de la mañana arrancaba para ir a trabajar. Cuando uno es joven hace cualquier cosa", graficó el DT, contando como arrancó su historia como entrenador.
"Ahora ya son muchos años los que llevo dirigiendo al Deportivo Maipú. Son muchos partidos los que he dirigido y creo que estoy pisando los 560 partidos. Me siento grande y veterano", ironizó.
Su relación con Omar, su hermano
"Con Omar tenemos discusiones de fútbol. Él ha estado adentro de una cancha y Omar sabe mucho de fútbol. Cuando nos peleamos, no nos miramos por tres días, y al cuarto día nos hablamos", confesó.
"Mi hermano Luis es un apasionado del fútbol. Lo tuve como jugador y después fue mi ayudante. Es un gran entrenador", contó.
Con respecto al buen momento que vive su equipo, que va primero en la Zona 2 del Federal A, explicó: "Nosotros en esta segunda etapa queremos repetir lo que hicimos en la primera rueda. Todos estamos ilusionados en clasificar al hexagonal y ascender. Acá lo importante es que estamos todos juntos, dirigentes, cuerpo técnico, jugadores y la hinchada".
Los 94 años del club
"Mi hijo Carlitos me decía 'cuando se fundó el club, yo ya jugaba en las divisiones inferiores', la verdad que me da mucha felicidad y orgullo. Me acuerdo de mi primer técnico Jorge Buchone, que me dirigió cuando tenía 12 años", recordó.
"Es muy lindo ver a crecer a Maipú, el predio que tenemos, acá hay mucha gente que trabaja como Hernán, mi sobrino, que le dedica mucho tiempo al club. Lo disfrutamos toda la familia Sperdutti", agregó.
Su definición como jugador
"Yo era un delantero rápido. Corría 200 minutos por partido y a veces le pegaba una patadita a los defensores. Tuve varias agarradas con el recordado Hugo Cirilo Memoli".
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