La tarde de fútbol en el estadio Presbítero Bartolomé Grella tuvo la noticia que todos esperaban. Si bien por parte de Diego Osella no hubo confirmación, es un hecho que Santiago Fosgt ingresará en lugar del suspendido Walter Andrade, retocando poco y nada a diferencia del encuentro que viene de empatar el Rojinegro ante Aldosivi en Mar del Plata. La buena presentación ante Boca Unidos como local desde el arranque, y la actuación ante el Tiburón, dándole solidez y sobre todo altura a la última línea, son los créditos que reúne el ex Colón para que el DT opte por él. Esta vez no como segundo zaguero, sino metido en la cueva, tratando de contrarrestar las embestidas de los atacantes decanos. En tanto que, pese a no ser un fútbol excluyente el mostrado en tierras marplatenses, lo poquito que se mejoró le permite a Diego Osella continuar con el mismo bosquejo, tanto esquemático como de nombres. Cuasi mismos intérpretes deberán tener la responsabilidad doble ante su gente: dejar los tres puntos en casa y continuar en esa búsqueda de fútbol ideal. LOS CUADRADOS. Luego de la charla inicial por parte del cuerpo técnico con el plantel santo, y tras la entrada en calor a cargo del profesor Sebastián Morrelli, el entrenador Diego Osella dispuso de un trabajo táctico en amplios y reducidos espacios. Es decir, con dimensiones de una cancha real, pero dividida en cuatro cuadrados (sin contabilizar las áreas). La misión constó en enfrentar dos equipos sin el propósito de convertir goles, pero si profundizar la tenencia del balón. Allí fue cuando el técnico pidió circulación del esférico por los cuadrados, donde el equipo con tenencia debía presentar cuatro jugadores en el reducto, al igual que su rival tratando de quitar la pelota. Esto es seguramente lo que querrá plantear el Coach ante Atlético Tucumán, tratando de juntar las líneas del equipo, achicando espacios para la tenencia, y presionando en bloque en busca de la recuperación. Por pasajes el mensaje fue entendido por los dirigidos, aunque cuesta aceitar esta idea, sobre todo teniendo en cuenta que se requiere de gran precisión. EN ZONAS. Los 11 nombres dispuestos por el entrenador rojinegro fueron Carlos Morel en el arco; Gabriel Graciani, Fosgt, Ignacio Bogino y Lucas Márquez en defensa; Marcelo Guzmán, Roberto Brum, Gastón Machín y José Luis García en mitad; Sergio Chitero y César Carignano en el ataque. Éstos enfrentaron a Agustín Bossio; Lautaro Geminiani, Marcos Minetti y Guillermo Ferracutti; Gastón Rossi, Damián Toledo, Germán Rodríguez Rojas, Alejandro Almada y Ricardo Gómez; Leonardo Acosta y Jonathan López. Así pues, la idea táctica del entrenador fue juntar a sus dirigidos en las zonas premarcadas. Por derecha Graciani, Brum, Guzmán, García; por izquierda Márquez, Machín, Brum, García, sumados a Carignano o Chitero en su sector, eran quienes salían desde el fondo, al mismo tiempo que presionaban cuando la pelota no estaba en su poder. En tanto que en los cuadrados de ataque, por derecha a Guzmán, Brum y García se sumaba un atacante, al igual que las proyecciones de Graciani, mientras que por el sector izquierdo Machín, Brum, García y el punta, sumaban en los avances a Rafa. Luego de varios minutos de trabajo intensivo, el entrenador dispuso de fútbol libre (sumando los arcos), donde el debe volvió a estar en la concreción tanto para titulares como suplentes, terminando el ensayo en un empate en cero. PARA HOY. Desde las 9.30 de este viernes, el elenco de Diego Osella entrenará en las instalaciones del club rojinegro, donde el DT volverá a parar el once que tiene en mente, para darle un poco más de rodaje, al mismo tiempo que se realizarán trabajos de pelota detenida.
