Chicago no pudo aprovechar la chance de quedar primero (al menos provisoriamente) y empató en casa ante Barracas dejando muchas dudas, sobretodo en ataque. El entrenador Mario Finarolli hizo autocrítica y expresó, "siempre es más fácil destruir que construir y Barracas vino a hacer su negocio, la cancha es un desastre pero no quiero meter excusas. Igualmente creamos varias situaciones de gol y generalmente estos partidos los perdes porque quedas mano a mano y te vas más tristes de lo que estamos, bah en realidad triste no me voy me voy fastidioso porque nos falta una buena actuación para estar tranquilos. En el segundo tiempo apostamos y decidimos jugar tirando centros porque por abajo en la cancha no podemos jugar, Peyrán tuvo tres posibilidades de tirar centros y no le pudo pegar porque la pelota salía para cualquier lado, ni tirar centros se puede. Ellos se cerraron bien, hicieron bien su trabajo, tienen gente alta, nos faltó el último paso. Defensivamente estamos bien, nos falta adelante, y a pesar de ello estamos cerca de la punta y esto es largo, estamos invictos pero necesitamos una buena actuación para que un día nos vayamos todos contentos a casa". Chicago quedará libre entre semana y el fin de semana que viene viajará a Campana a jugar con Dálmine, con el regreso de Bochi (cumplió la suspensión) y habrá que esperar la evolución de los lesionados, sobretodo de Ronconi y Francou que llegan a su última semana de recuperación. En tanto, Christian Gómez terminó con el aductor muy cargado, al borde de la contractura.
