Tras los prematuros alejamientos de Hernández y Cabrera, otros jugadores seguirán sus pasos, por lo que el gran desafío de la subcomisión -en caso de seguir- o de quienes se decidan a tomar las riendas del fútbol, será sostener a un plantel tentado por otras ofertas y a algunos jugadores disconformes por la incertidumbre que les toca vivir. Evitar que el grupo se desarme, independientemente de los refuerzos que pretende sumar el DT Ragusa, será la premisa. En este sentido, Leandro Zárate y Matías Ceballos definirán su futuro antes del encuentro del lunes con San Jorge. Y lo cierto es que las proyecciones ubican a ambos más afuera que adentro de la Vicente López para el 2014. Si bien hay dirigentes y allegados interesados en hacer un esfuerzo para que la Chancha siga en el club, el jugador recibió tentadoras ofertas de clubes que estarían dispuestos, incluso, a pagar la cláusula de rescisión por el “9”. No es muy diferente el caso del enganche santafesino, que ya les manifestó a los dirigentes su intención de emigrar y cambiar de aire.