El pase de Nicolás Aguirre, de Juventud Antoniana a Sportivo Belgrano, se vuelve más complicado, más complejo y más polémico. Aguirre sigue esperando que Juventud ceda sus pretensiones y lo deje partir al club cordobés, que milita en la Primera B Nacional. “Es una oportunidad única que tengo”, reiteró el jugador. Pero, hasta ayer no había tenido éxito. La dirigencia del santo, el interventor Fredy Mocchi y dos colaboradores Pablo Simkin y Marcelo Romero, no dieron brazo a torcer. “Hablé con los dirigentes (el sábado a la tarde) y no llegué a ningún acuerdo, están firmes pidiendo una cantidad de dinero que es imposible pagar, y si pudiera lo pagaría yo, pero es mucha plata”, contó una vez más el atacante mendocino. En el mismo sentido, se refirió Nicolás Dattas, el representante del delantero, quien contó que los dirigentes de Sportivo Belgrano iban a intervenir para tratar de destrabar el conflicto. Juventud pide 150 mil pesos para liberar al jugador, Sportivo, Dattas y Aguirre ofrecen 100 mil y por ahora no hay acuerdo. La dirigencia del club cordobés intentaba comunicarse anoche con los antonianos. Como la mano viene dura, Dattas sostuvo que si el pase del futbolista se cae, “exigiremos un nuevo contrato, porque no se condice lo que piden para liberarlo, con lo que le pagan”, sostuvo el representante. Si esto llega a ocurrir, el problema podrá trasladarse con otros futbolistas, como un efecto dominó. Dattas fue más allá y amenazó con pedir la libertad de acción en Futbolistas Argentinos Agremiados (cabe recordar que Juventud ya tuvo varios conflictos con este gremio en procesos anteriores). “A Nico le deben dos meses de sueldo y con solo uno ya se puede pedir la liberación por falta de pago”, aseguró el representante.
