Matías Guerra llega al cuervo con la premisa de ganarse el puesto y hacerse un lugar en el equipo titular de Coleoni. En su segundo día de pretemporada junto al plantel de Central Norte, Matías Guerra se mostró más distendido y ya comparte charlas y comidas con sus compañeros en un ambiente ameno. No obstante, a la hora de hablar de lo que pretende lograr en el cuervo, Guerra se pone serio y con sus palabras demuestra que tiene bien claro su objetivo. “En el equipo que estuve anteriormente jugué muy poco en competencia, fui mucho al banco y tuve poca participación. Yo vine acá buscando continuidad porque sé que hay muchas chances de jugar, siempre y cuando uno esté bien. Pero yo vengo a pelear el puesto porque no me la creo tampoco, sé que no por venir del Nacional B voy a jugar seguro. Tengo que hacer las cosas bien y demostrar que por algo confiaron en mí”, expresó el refuerzo azabache proveniente de Independiente Rivadavia de Mendoza. Cómo enganche la tarea de Guerra en la alineación azabache sería fundamental, ya que la mayor parte del juego pasaría por él. Consultado por este desafío, el jugador no se achicó y dijo estar a la altura de la situación. “Me siento listo. Esta no va a ser la primera vez que lo voy a hacer. Yo estoy convencido de que vengo a hacer lo mejor posible, que por algo confiaron en mí y hay que demostrarlo en la cancha. Gustavo (Coleoni) me conoce y sabe lo que puedo dar y lo que no. Lo principal ahora es ponerse bien y cuando agarre la pelota tratar de meter lo que uno sabe, y en la pretemporada agregarle lo que a uno le falta para llegar bien al inicio del torneo”, dijo. Consultado por los motivos que lo llevaron a Guerra a aceptar jugar por primera vez un Argentino A y llegar a Central Norte, el jugador contó: “Este es un club grande que te exige pelear cosas y por algo uno eligió venir acá, porque sabe lo que es el club y lo que se puede dar. Creo que como todos mi compañeros tengo el entusiasmo para obtener la clasificación. Pero además decidí venir acá porque contaba con el apoyo de mi familia. Mientras mi señora y mi nena estén tranquilas y cómodas yo me voy a concentrar en el juego”.