Primera Nacional - PATRONATO - ROBERTO BRUM

"Había que romperse el alma"

El volante uruguayo de Patronato ya estampó su estilo en la cancha y en las declaraciones. Si bien t

Solo una semana le bastó para conocer a sus nuevos compañeros y convencer al entrenador Diego Osella que debía contar con el rápidamente. Roberto Brum llegó el día 10 de agosto a Paraná, el 11 entrenó por primera vez y el domingo fue junto a Sergio Chitero y Walter Andrade de lo mejor de Patronato en el triunfo por 2 a 0 ante Douglas Haig.
El volante se mostró muy conforme con lo realizado por el equipo y por su presentación personal, así lo hizo saber tras el encuentro en diálogo con EL DIARIO.
En referencia al partido y a las particularidades que tuvo el uruguayo, comenzó contando: “Era una vergüenza el estado de la cancha, eso no tiene que ser una excusa porque era para todos igual. El más inteligente se iba a quedar con los tres puntos y gracias a Dios fuimos nosotros. Logramos convertir antes del final del primer tiempo con un golazo de Chite (Sergio Chitero)”.
Brum se mostró contento porque Patrón logró mostrar su temperamento en Pergamino y dijo: “Apareció el equipo y tiene cosas para seguir mostrando. Vamos de menos a más pero aún falta muchísimo para que esto termine”, a lo que agregó: “Me voy muy contento, sobre todo por los tres puntos. Quería debutar con un triunfo y por suerte se nos dio”.
De los rasgos mostrados por el plantel ante el Fogonero, el Pelado indicó: “Fuimos un equipo solidario, supimos leer el juego ya que no era una cancha para jugar lindo. Había que romperse el alma y correr todos juntos, desde lo futbolístico el partido fue muy pobre”.
“Para los delanteros es importante hacer goles, estamos muy contentos por ellos y esperemos que sigan con la ilusión y las ganas para que el próximo partido puedan volver a convertir”, culminó marcando en referencia a la aparición en la red de Sergio Chitero y César Carignano.
UN SOLDADO. Roberto Brum mostró una carta de presentación brillante. El volante central uruguayo se paró de doble cinco junto a Marcelo Guzmán, otro obrero de la mitad de la cancha. El pelado fue sacrificio, garra y también claridad. Desde sus pies salieron muchos cambios de frente que encontraron al Tano Rossi con libertad y espacio en la banda derecha. Pero como si esto fuera poco, también fue voz de mando. Desde su lugar habló y ordenó todo el tiempo a sus compañeros. En todas las discusiones que tuvo el partido estuvo presente, mostrando también algo de su temperamento. Si repite este tipo de presencias será rápidamente uno de los preferidos de los hinchas entrerrianos.