Aunque recuperarse cuesta, Crucero del Norte debe levantar cabeza si quiere seguir peleando los puestos de ascenso. La caída 2-1 ante Huracán en el Ducó significó un leve golpe, predecible en la previa, pero algo doloroso por ir en ventaja gran parte del partido.
“No hay que bajonearse y en este tipo de torneo siempre tenés que tener el mejor ánimo para responder. No fue lindo arrancar el año perdiendo, pero esa bronca que nos quedó la tenemos que sacar”, indicó el mediocampista Juan Manuel Olivares tras el encuentro.
La ausencia de Claudio Fileppi, suspendido por su expulsión ante el Globo, sería cubierta por Enzo Bruno o Ariel Cólzera, ambos inactivos por distintas lesiones.
“Son un club modelo con una estructura sólida y que trabaja muy bien desde las inferiores hasta primera división. Para nosotros son de consulta permanente y aprovechamos su experiencia”, señaló el presidente del club misionero, Julio Koropeski en referencia al rival de turno.
Sin dudas que el próximo lunes desde las 21.30 el Andrés Guacurarí presenciará otro momento importante para Crucero en estos poco más de diez años involucrado en el ambiente futbolístico, otro motivo suficiente para estar a la altura de las circunstancias.
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