Con el regreso de tres jugadores suspendidos, el entrenador Cruzado pone en cancha a su equipo ideal. Dibujo táctico: 4-3-1-2.
Basta de misterios. No existen más especulaciones. El entrenador Cruzado, Pablo Cuello, ya sabe los once jugadores Cruzados de memoria. El objetivo: volver al triunfo. Recuperar la agresividad ofensiva y pisar fuerte en casa con su táctica ideal: 4-3-1-2. El rival de turno, Gimnasia y Tiro de Salta, un grande del mundo del ascenso, será el primer desafío que tiene el elenco Cruzado para meterse en la fase play off por el segundo ascenso a la B Nacional.
El primer cambio que realizará el entrenador con respecto al equipo que igualó con Alvarado de Mar del Plata el último lunes, será el regreso al arco del cordobés Luis Bonacci, quien remplazará al histórico Oscar Olguín.
En la última línea, Víctor Benítez, que jugó como carrilero por izquierda, se posicionará como marcador de punta derecho en lugar de Javier Murcia, quien vuelve al banco de suplentes. Los otros jugadores que conformarán la última línea serán: Silvio Duarte, Santiago Arrachea e Ignacio Anívole (jugador que no siente el puesto pero se mostró predispuesto a cumplir con esta función).
El mediocampo combativo estará compuesto por Mariano Méndez (volante por derecha), quien vuelve tras una fecha de suspensión, idéntico caso para el volante central, Rodrigo Malbernat y por izquierda jugará el polifuncional, Fernando Morán.
El enlace del elenco de Cuello será, nada más ni nada menos que Sebastián Coria. El Pampero también vio la roja en Tandil y no pudo estar contra Alvarado. El ex San Martín es clave cuando tiene la pelota en sus pies en todas las pelotas paradas. El bloque ofensivo estará conformado por la dupla Gonzalo Parisi y Juan Paulo Suraci, quien vuelve a la titularidad por Kevin Leguizamón.
