Habían pasado 50 minutos de terminado el partido en Avellaneda, cuando el entrenador Omar De Felippe se presentó al salón de conferencia de prensas del estadio Libertadores de América para dar sus impresiones. Sus principales conceptos con relación al partido fueron los siguientes: "Estoy muy contento por los chicos. Hoy mejoramos en lo futbolístico, pero lo más importante es que convertimos, y en el fútbol para ganar hay que hacer goles. Hoy pudimos meter las oportunidades que en otros partidos no podíamos, salvo contra Sarmiento, cuando jugamos muy mal y casi no creamos ocasiones de gol. Me gustó que se formaron algunas interesantes sociedades, como la de Villalba y Mancuello por izquierda. También destaco que Parra jugó donde siempre le pedimos que juegue, adentro del área, para que aproveche sus condiciones para marcar. Si tengo que analizar el desarrollo del juego, creo que arrancamos mal, imprecisos, con pelotazos largos que le devolvían la pelota al adversario y eso es peligroso. Pero después mejoramos y por momentos nos defendimos con el balón. Con el gol el equipo se tranquilizó y tuvo algunos minutos de buen fútbol. Al final terminé tranquilo, porque vi que en los últimos 15 minutos el equipo se fue soltando y muchos jugadores retomaron el nivel individual que esperamos de ellos. Eso es muy positivo, porque da confianza y puede servir para seguir levantando en los próximos partidos". No le esquivó al bulto De Felippe cuando lo consultaron sobre la incidencia del arreglo económico en el rendimiento de los futbolistas. Enérgico, esto expresó el DT: "Anoche, en una reunión en el hotel, nos contaron que se había llegado a un acuerdo con la participación de otros sectores políticos, que van a formar parte de la Subcomisión de Fútbol, y que van a colaborar para salir de esta difícil situación. Hoy nos pidieron otra reunión a las 13:30 , después de almorzar, y les dije que sí pero que fuera corta porque los jugadores ya estaban mentalizados en el juego con Talleres. Fueron sólo 5 minutos y nos dijeron que se había acordado el pago de la deuda. Pero que no hay que enfatizar tanto en esto. Es importante que cobren, pero estos jugadores están muy comprometidos con la camiseta. Muchos de estos chicos sienten una deuda con el club por haber descendido. Ya habíamos hablado de este tema de la deuda, y cuando yo lo consulté con el grupo, todos, los 33 futbolistas, me expresaron que querían seguir laburando, que iban a seguir adelante, porque lo único era el ascenso de Independiente. Es así. El dinero en algún momento lo van a cobrar. Pero yo me quedo con la dignidad de estos muchachos. Eso me hace sentir muy orgulloso de ellos. Se notó cuando vinieron a festejar el primer gol con los que estábamos en el banco de suplentes. Estoy muy contento por ellos".
