Al arquero Ignacio Arce le tocó salir a escena con tan sólo 18 años. De un momento para otro, el nombre del paranaense sonó en todos los medios. Aquel 24 de septiembre de 2010, el por entonces golero titular de Unión de Santa Fe, Alejandro Limia, se encontraba lesionado y Arce fue el elegido para cubrir los tres palos del Tatengue contra Patronato, en un partido correspondiente a la Primera B Nacional.
Si bien su equipo perdió 2 a 0, en barrio Corrales de la capital entrerriana –su barrio- estaban de fiesta porque la joven promesa daba sus primeros pasos en el profesionalismo.
Nacho ya venía asomando y mostrando condiciones en el seleccionado argentino Sub 17 con el que clasificó y jugó el mundial en Nigeria 2009. Sin embargo, nunca logró afianzarse, ni en el Tate, ni tampoco en Deportivo Merlo, equipo al cual fue cedido a préstamo en 2012.
EL REGRESO. A mitad de este año decidió sumarse a Atlético Paraná para seguir creciendo en el profesionalismo, tiene tan sólo 22 años y si bien se define como "un chico grande", le queda mucha tela por cortar.
El cuerpo técnico le dio la posibilidad que venía buscando desde hace tiempo y ya comenzó a pagar con creces al ser la figura del Decano contra Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay.
"Fue un partido donde nos atacaron más, sobre todo en el primer tiempo. Nos costó acomodarnos en los primeros minutos, la cancha era ancha y tuvimos que adaptarnos a los espacios. Pero las cosas me salieron bien a mí y al equipo. Estoy contento por lo bien que me fue, por el punto también; pero a la vez con bronca porque se pudo haber ganado", dijo Nacho.
-Debes haber trabajado mucho la cabeza para no perder confianza, teniendo en cuenta que no tenías tanta continuidad.
-Sí, obvio. La confianza y la tranquilidad que te da saber que uno es titular, generan más ganas de hacer las cosas mejor y entrenar el doble en la semana. En Unión no lo tuve, pero igual siempre trabajé la cabeza para el aspecto anímico y busqué estar de la mejor manera. Ahora que tengo la oportunidad voy a hacer el doble esfuerzo y sacrificio. Es cuestión de sumar minutos, porque siempre confié en mis condiciones y en todo lo que hacía. Es muy importante tener las cosas claras.
-Tuviste mucha ansiedad en el primer partido con Paraná, teniendo en cuenta que venías con pocas participaciones.
-En el primer partido uno tenía la ansiedad de que lleguen para ver como respondía. Después vi que el equipo estaba bien ordenado y eso da más confianza para actuar en el encuentro. Ahora tengo la oportunidad y tengo que demostrarle al técnico y al grupo. Gracias a Dios esta semana trabaje con más confianza y tranquilidad.
-¿El volver a estar en tu ciudad ayuda mucho en el ánimo para realizar buenas actuaciones?
-Sí. Hice todo acá en la ciudad de Paraná, después me fui a Unión donde me tocó alternar buenas y malas. Pero el pueblo, la familia te dan una revancha, estoy de vuelta en mi ciudad y eso es lo que más me alegra y sobre todo que los de tu ciudad hablen bien de mí. Además estar cerca de mi familia es muy importante. Ojalá podamos hacer bien las cosas, tenemos las posibilidades de ascender. Estoy muy contento con toda la gente y es un club que se puede hacer más importante de lo que es.
LA EDAD. Si bien el fútbol lo expuso ante grandes responsabilidades con poca trayectoria, Arce cree que el estar en planteles profesionales desde corta edad le ayudó mucho para su maduración. "Por ahí en mi puesto se llega un poco más de grande, pero yo me creo un chico grande. Arranqué desde muy chico en un plantel profesional que te enseña muchas cosas. También por mí personalidad siempre quiero un poco más. Sé que soy chico, también sé que voy a tener errores, pero voy a ir aprendiendo. Ahora tengo esta posibilidad para demostrar al equipo, a mí mismo, a la gente y a los de Unión también que soy un arquero con muchas condiciones y que sé manejarme a pesar de esta corta edad", afirmó.
LA SELECCIÓN. Antes de debutar en Unión, el Negro jugó para las inferiores de la Selección Argentina, de la que guarda grandes recuerdos: "La verdad que fue muy lindo estar ahí, tener esa oportunidad. Cuando uno es chico no se da cuenta del lugar en el que estaba, obviamente que me queda bronca por algunas chiquilinadas que llegué a hacer. Pero el fútbol te da revancha, hoy en día quedó algo bueno en mi pasado, también me ayudó para madurar y decidir lo que tengo que hacer y qué no. Fue muy lindo, uno nunca sabe; tal vez de más grande tenga nuevamente esa oportunidad. Es un muy buen recuerdo para mí y estoy tranquilo con eso".
"Fui Sub 15, después en Sub 17 hice toda la división, clasificamos y fuimos al mundial. Y en Sub 20 tuve la convocatoria pero quedé ahí", contó Nacho con respecto a su trayectoria selectiva.
EL EQUIPO. Por otra parte, el arquero analizó el plantel y, al igual que sus compañeros, cree que Atlético Paraná tiene un plus por la base que ya viene trabajando. "Es muy importante tener la base hecha. Hay equipos que se vienen armando desde la pretemporada. Contra Textil se notó que son un equipo nuevo y le costó jugarnos con la misma intensidad. Ahora tenemos que seguir igual, con ese orden, ya que las cosas van a venir solas. Se vio que los chicos que entraron lo hicieron de buena manera, y todo el plantel apoya al grupo. Esta base que viene de antes se suman la ganas de los chicos que vienen de afuera, con concentración y ganas para ser titulares".
El Decano intenta ser protagonista en todas las canchas, ser ofensivo y buscar el arco rival. "A mí me gusta que el equipo ataque, y la defensa es la que venía jugando y lo viene haciendo muy bien para mantener el equilibrio. Soy un aquero que me gusta jugar con los pies, obvio que quiero que seamos ofensivos. Me parece que este equipo se identificó en tener buena defensa, ataques explosivos, más que nada por los laterales, y buenos movimientos de los delanteros.
PRÓXIMO ENCUENTRO. "El rival (Sportivo Patria de Formosa) arrancó muy bien con una goleada, pero ahora es otro partido y tenemos que seguir demostrando para qué estamos. De local se tiene la necesidad de que los puntos tienen que quedar en casa. Después la actitud ganadora, la humildad y el sacrificio de querer ser protagonistas está siempre, y lo intentamos imponer en cualquier cancha. Se puede dar o no, son circunstancias del juego, pero nos empeñamos en ganar los partidos.
