Chicago le regaló un triunfazo a Christian Gómez que se transformó en el jugador con más partidos con la "verdinegra". Derrotó 2 a 1 en Córdoba a Instituto y se metió de lleno en la pelea por ascender. El propio Gómez y Matos anotaron para el "Torito", descontó Mazzola para Instituto, que se fue envuelto en un mar de dudas.
No hay con qué darle. Córdoba a Chicago le sienta bien. En la historia cercana, cuando viajar para jugar se hizo más costumbre, Chicago está lleno de mitos y de logros en tierras mediterráneas. Dos ascensos, un campeonato, victorias importantes, lo que guste y ante todos los equipos. Hoy sumó dos hechos que alimentan el dicho de "tierra santa", el primero y más importante es que volvió a ganarle a Instituto y los tres puntos lo meten de lleno en la pelea a dos fechas de terminar la primera rueda. Y el segundo es que en Córdoba, Christian Gómez se transformó en el jugador que más veces se puso la casaca de Chicago. 339 partidos superando por uno a Oscar "Titi" Loyarte. En Córdoba, justo donde "Gomito" ascendió a Primera, y para no ser menos, lo festejó con un triunfo y con un gol propio, un gol que marcó el camino en un partido hasta ese momento incierto.
Chicago pegó justo y el local lo sintió. Lo aseguró Moreyra luego en vestuarios… "sentimos el golpe". Se terminaba el primer tiempo, tiempo adicionado, desborde de Galarza, gran cabezazo de Matos que con esfuerzo Barucco despejó hacia un costado, pero allí llegó primero que todos el histórico Gomito para tocar al gol. Pitazo y a los vestuarios.
En ese primer tiempo si analizamos situaciones de gol, fue Instituto quien mereció la ventaja, aunque Chicago fue quien manejó la pelota y el ritmo del partido después de los primeros diez minutos. Con Soda bien abierto en la derecha, con García de enlace, las subidas de Maldonado por el otro lado, La Gloria empezó por afuera a llegarle a la visita. Y lo tuvo Velázquez y lo tapó el "Oso" Sánchez. Y después lo tuvo Moreyra de cabeza y después Maldonado con dos remates que obligaron al portero. Fue una ráfaga de 10 o 15 minutos, hasta que el "Torito" se acomodó en la cancha y empezó a manejar la pelota. Se acentó De la Fuente, Fattori y Barbona fueron la combinación justa entre quitar y jugar, "Gomito" se asoció a los chicos, sólo faltaba que el "Mudo" Ruiz se enganchara con los demás y que le llegue la pelota al 9. En dos pelotas paradas lo tuvo Matos pero Barucco respondió bien.
Chicago ganó el duelo de la posesión de la pelota, pero no aceleraba en los metros finales, le bajó el ritmo al juego y lo hizo largo y ancho, distanciado, a Instituto. Casi sin llegar a Barucco, con poca velocidad, la visita se adueñó del medio. Instituto era más vertical, era voraz, pero también se pasaba de acelerado y terminaba siendo revoltoso y confuso. Así y todo, siguió generando situaciones y siguió erigiendo en figura al "Oso" Sánchez. Raro, un equipo que claramente no jugaba bien, que tenía problemas posicionales, desbordado en el medio, generaba situaciones con asiduidad y armaba un partido entretenido y de ida y vuelta.
Con Soda casi como extremo, Aguirre se recostó en la derecha y Correa quedó muy solo en la contención. Los laterales no se soltaron y el medio quedó desprotegido, Maldonado se cerraba un poco para darle apoyo al volante central, pero su vocación ofensiva lo hacía también "abandonar" al 5. Allí, Chicago le armó un triángulo, con De la Fuente, Fattori y Barbona y le manejó la pelota. Galarza y Arias subían y ayudaban a copar el medio. Barbona fue el eje, de él nacían los ataques, se asociaba con "Gomito", pero también de él salía la presión con la cual Chicago recuperaba la pelota, junto con Fattori.
El gol al final cambió el segundo tiempo. Instituto salió golpeado, nervioso, lleno de dudas, desde el banco hasta en la cancha. Mazzola salió de entrada por Soda para jugar definitivamente con dos puntas y el "Pipi" García de enganche. La visita fue más compacta, fue un equipo más corto, bien cerrado atrás y con peligrosidad en las contras. Creció la figura de De la Fuente que no sólo quitó sino que supo jugar. La dupla Fattori-Barbona, como en Pergamino, volvieron a ser los mejores. Estaba más cerca del segundo Chicago que del empate "La Gloria". Y así, fue, a los 16 Arias subió al ataque, mandó el centro al área y Matos conectó de derecha arriba para sentenciar el partido.
Hasta los 42, no hubo partido. Chicago dejó la voracidad de contragolpear de lado, aunque tuvo chances para golear al local, y se dedicó a cuidar la pelota y a defender un poco más allá del área de Sánchez. Instituto cayó definitivamente en su propia telaraña, nunca tuvo ideas para poder llegar al arco. Los jugadores erraban el camino y "Miliki" desde el banco mandaba más desorden a la cancha. Con los cambios cambió el sistema más de una vez, terminó jugando con tres en el fondo, con tres delanteros y con jugadores en el medio que jugaban como en el barrio, de lo que fuera.
La tranquilidad de la visita, agrandaba más los nervios del local. Labruna lentamente fue cerrando el partido. 4-4-2 y a jugar por afuera con los dos tanques arriba.
Pero a los 42, Mazzola descontó en una jugada digna de lo que fue Instituto, pura confusión hasta que el ex Independiente anotó. Ahí el partido creció en dramatismo, Moreyra se fue a jugar de nueve, Instituto trató de llenar el área de centros al seguro Sánchez, que se contagió de la tranquilidad del equipo para estar más tranquilo en el final. Sólo centros y arremetidas tuvo Instituto hasta el final de Guaymas. Hasta tuvo Matos el tercero antes que un local el empate.
En medio de silbidos y de dudas se fue Instituto. Las deudas, los malos resultados, el no ganar en casa, el estar muy lejos de los ascensos en un torneo que brinda cinco por zona, siendo un equipo con ansias de Primera desde hace años… todo se juntó en la desazón final, en las caras finales, en las broncas de los hinchas y en el silencio de los protagonistas en los vestuarios.
Chicago deja Córdoba entonado. Hizo valer el empate ante Boca Unidos, se metió en el lote de los 6 o 7 equipos que purgarán por los 5 lugares a Primera. Demostró personalidad al igual que en Pergamino y lentamente empieza a despejar dudas, sólo las tiene que terminar de sacar en Mataderos, donde no gana desde la segunda fecha y donde los hinchas ven y perciben otra cosa.
SINTESIS
INSTITUTO CBA. (1): Rodrigo Barucco; Raúl Damiani, Julio Moreyra(c), Abel Masuero (69, Gustavo Gotti), Damián Schmidt; Pablo Soda (46, Nicolás Mazzola), Maximiliano Correa, Marcos Aguirre (57, Leandro Sapetti), Juan Carlos Maldonado; José Luis García y Javier Velázquez. DT: Daniel Jiménez.
Suplentes: Adrián Domínguez, Emiliano Castro, Ignacio Antonio y Adrián Peralta.
NUEVA CHICAGO (2): Alejandro Sánchez; Marcos Galarza, Matías Escudero, Nicolás Sainz, Mauricio Arias; Federico Fattori (74, Alejandro Gagliardi), Fernando De la Fuente, David Barbona; Pablo Ruiz (64, Adrián Maidana); Christian Gómez(c) (80, Diego Mendoza) y Sebastián Matos. DT: Omar Labruna.
Suplentes: Federico Lanzillotta, Samuel Cáceres, Martín Caballero y Nahuel Benítez.
GOLES: (45) Christian Gómez (NCH), (61) Sebastián Matos (NCH), (87) Nicolás Mazzola (I)
AMONESTADOS: Aguirre, Correa (I); Fattori, Escudero, Maidana, Arias (NCH).
EXPULSADOS: No hubo.
INCIDENCIAS: No hubo.
ARBITRO: Federico Guaymas (bien).
ASISTENTES: Damián Espinoza y Javier Pereyra.
LA FIGURA: David Barbona (NCH).
ESTADIO: Monumental de Alta Córdoba.
CAMPO DE JUEGO: Bueno.
PUBLICO: 8.000 personas aprox.
