Mariano fue titular por segunda vez y no desaprovechó su chance, pero reconoce que Toloza y Lazzarini "son dos jugadores importantísimos".
Desde que llegó a Mitre esperaba tener un partido como el del sábado. Fue decisivo y determinante. Porque sus dos goles, los del 2 a 0 de Mitre sobre Textil Mandiyú, sirvieron para conseguir tres puntos muy valiosos. Aunque eso no le cambia demasiado la vida a Mariano Campodónico, un veterano de mil batallas y cuatro ascensos, que llegó al Aurinegro con el sueño de conseguir el quinto.
"La verdad que me sorprendió Carlos (Roldán) el jueves cuando me incluyó para el equipo titular. Sigo pensando que tanto Emanuel (Lazzarini) como el "Negro" (Toloza) son dos jugadores importantísimos que nos dieron muchísimo y me sorprendió estar entre los once", dijo con total sinceridad el delantero, en un mano a mano con EL LIBERAL tras la práctica matutina de ayer.
"Me parece que influyó lo de la cancha chica y quizás se pensó que el juego iba a pasar más por arriba que por otro lado, como lo hicimos en Libertad de Sunchales, esos fueron los dos únicos partidos que me tocó jugar de titular. Traté de hacer las cosas bien, sumar para el equipo, llegaron los goles al final y mucho mejor. Hacía mucho que no me tocaba marcar y pasé una semana contento y feliz", agregó.
Pero Mariano es de esos jugadores que no pregunta cuando los ponen ni cuando los sacan, menos a un DT como Roldán. "Carlos me conoce bien, en Tucumán me ha tocado salir del equipo también y en su momento entró ?Jota? Morales y las cosas salieron bien. No soy de preguntar, el técnico sabe el porqué uno tiene que jugar y porqué tiene que salir. Después lo puede compartir o no, pero yo siempre sumo de adentro o de afuera. Si me toca ir a la platea también voy a sumar. Cada vez que me toca salir o jugar, siempre lo hago con la misma cara y el mismo entusiasmo y ayudando a mis compañeros tanto de adentro como de afuera", explicó. Sin dudas, todo un líder positivo.
Confianza
Pero tras ese doblete, Campodónico ganó en confianza. "Si vos le preguntás a Emanuel, a mí o a cualquier delantero, quiere hacer goles todos los fines de semana. Nosotros vivimos del gol y es bueno marcar. Yo estaba contento cuando entraba un ratito pero quería entrar y hacer un gol porque es lo que nos gusta hacer, así que los dos goles del otro día vinieron muy bien y esta semana uno la enfrenta de otra manera, con el optimismo más arriba, con ganas de volver a jugar y volver a marcar, así que hoy (por ayer) ya empezamos a laburar pensando en Chaco".
La pregunta que se repite es, ¿cómo se hace para seguir vigente y tener esas ganas a los 40 años? Y él le pone humor a su respuesta: "Cumplí 41 ya, está pesadísimo, el uno ese me pesó muchísimo". Pero de inmediato se pone serio. "El día que me levante y no tenga esas ganas, va a ser el fin de mi carrera. Disfruto mucho el día a día, el vestuario, el venir a la mañana bien temprano a tomar mate y reírme con mis compañeros. Me cuidé bastante en mi carrera y por eso hoy sigo jugando. Tuve la suerte de no tener lesiones importantes en mis rodillas que me dejan correr. Y después, la responsabilidad. Me pongo objetivos y el objetivo este año era tratar de hacer un buen campeonato, tratar de jugar la mayor cantidad de partidos posibles. Y el objetivo que tenemos todos, vine acá a tratar de lograr el ascenso y es un sueño que no me lo va a sacar nadie", asegura convencido. Y sabe que es ejemplo para los jóvenes. "Es lo que uno quiere, ser un espejo o mostrar eso. A los chicos a los que los doblo en edad por ahí les digo que cuando yo a su edad era igual, por ahí entrenaba a veces con menos ganas y estaba mal. Tuve además muchos compañeros que me enseñaron y me dijeron que las cosas se tenían que hacer de otra manera y tuve la sabiduría de escucharlos", cerró.
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