Suele salir rápidamente el Guly a hablar con los periodistas tras cada partido de Chicago. Luego del golpazo recibido en Floresta, tardó más de la cuenta el DT, pero igual dio la cara y enfrentó brevemente a la prensa, "es un resultado muy doloroso, me dolió mucho ver a muchos de los chicos que además de jugadores son hinchas en el estado en el que están, están muy mal y es entendible. Los dos goles del segundo tiempo nos sacaron del partido, no tuvimos reacción, fueron dos golpes muy duros y no nos pudimos levantar más. Autocrítica siempre, porque el responsable del equipo soy yo y ahora hay que trabajar en la semana para revertir esta imagen".
La próxima fecha Chicago recibe a Brown de Adrogué en lo que parece ser un partido clave para el DT, que no termina de entrar en el corazón verdinegro y después de lo de esta tarde le costará aún más.
En tanto, Samuel Cáceres que salió en camilla directo al vestuario cuando Chicago ganaba 1 a 0, en principio tiene una distensión de ligamentos de la rodilla izquierda, por lo cual le harán estudios para determinar el grado de la lesión.
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