Estuvimos imprecisos, erráticos en los pases y no tuvimos la intensidad para los duelos individuales. Las posiciones estaban en el lugar adecuado, quisimos hacer las cosas que habíamos ensayado", indicó el Gringo.
El dominio de la pelota, atributo característico de este equipo, escaseó. "Nos costaba tenerla, no éramos nosotros, aunque estaban los espacios. Me preguntaba "¿qué estaba pasando?", pero estos partidos pueden pasar", afirmó Heinze. La defensa (Mosevich-Laso-Freire, con Martínez sancionado y Torren relevado) fue otro punto flojo: "Se perdió más de lo que se ganó en los duelos, como estábamos acostumbrados. A Mosevich lo vi muy bien, firme en su primer partido con nosotros".
Una de las apuestas de la tarde fue Alexis Mac Allister, quien "no fue un falso 9", según el DT, sino un mediapunta que buscaba asociarse y triangular con los dos internos para abrir con los extremos, un poco más cerrados inicialmente. "En el segundo tiempo, Alexis compartió campo con Colman y lo puse a Fabricio (Lenci) para el toque final, para algún centro que estábamos buscando y abrí los wines. Yo lo vi muy bien a Ale", explicó el Gringo.
Justamente, sorprendió la ausencia del cerebral Colman en el 11 inicial. "No fue por descanso, porque estaba perfectamente. Me imaginé muchas más segundas pelotas, como fue, pero no la pudimos aprovechar. Imaginé dos futbolistas de distribución, como Machín y Rolón, jugar con gente lanzada (al ataque) y un descenso de Alexis. Cuando no pasaba eso, y perdíamos las segundas pelotas, se complicaba", analizó minuciosamente el entrenador.
Por último, con dos derrotas en el reinicio de este torneo, Heinze dio un mensaje de calma y optimismo, de cara al importante duelo del próximo lunes ante Chacarita, en La Paternal. "Hay que revertir esta situación, seguir trabajando y planificar el lunes de la mejor manera. No hay que alarmarse", resaltó.
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