El zaguero trabaja contrarreloj para llegar en plenitud al choque decisivo del sábado ante Unión Sunchales. "El plantel sabe lo que quiere y el grupo está entero", expresó.
Julio Villarino fue en la derrota de Gimnasia y Tiro frente a Mitre, en Santiago del Estero, un termómetro de la enjundia y la garra del equipo, que la peleó hasta el final pese a haber sido bien superado por el rival. El zaguero central jugó casi todo el partido en una pierna hasta que fue reemplazado en el complemento a causa de un esguince en uno de sus tobillos, por lo que esta semana trabaja contrarreloj para acelerar su recuperación y poder llegar en plenitud al partido decisivo que tendrá el albo el sábado por la noche ante Unión Sunchales en el Gigante del Norte, aunque hoy por hoy su presencia sigue estando en duda.
"Lo del domingo ya pasó, no nos queda otra que dar vuelta la página. Estábamos haciendo un buen partido, hasta el penal ellos no nos habían complicado. Dio bronca perder porque nos plantamos bien y pudimos llevarnos algo más", expresó el defensor en diálogo con El Tribuno, para luego destacar: "Este grupo suele sobreponerse, como pasó con Patria, que tras perder, ganamos cuatro partidos seguidos. Lo importante es que el grupo no se desvía del objetivo, una caída no cambia el foco, el plantel sabe lo que quiere, el grupo está entero".
Villarino opinó que "en este pentagonal parejo el local saca un plus y se hace fuerte. Así como Mitre se hizo fuerte ante nosotros, confío en que Agropecuario ante ellos podrá imponerse en su casa, pero la obligación suprema es nuestra, hacernos fuertes en nuestra casa el sábado. Tenemos que estar a la altura. Nada servirá si nosotros no logramos ganar, a eso lo tenemos claro".
El oriundo de Puerto Madryn recreó el marco imponente que se imagina para el domingo en el estadio de la Vicente López. "Nos sentiremos acompañados, siempre es importante tener a nuestra hinchada de nuestro lado, sobre todo para empujarnos en los momentos más complicados. Y en cancha imagino a un rival tan duro como Mitre, aunque ningún equipo es igual a otro, cada uno tiene sus fortalezas. Enfrentaremos a un rival que se conoce de memoria, con jugadores que juegan bien y están juntos hace tiempo, que desde hace dos años vienen siendo protagonistas. Tenemos que encontrar sus debilidades, pero sobre todo hacer lo que venimos haciendo de local", puntualizó, para a renglón seguido referirse a la ansiedad de todo el grupo. "Tratamos de mantenernos al margen y estar más allá de la ilusión del hincha, de la expectativa del dirigente, del periodista. Sabemos lo que nos jugamos, pero mantenemos la tranquilidad, los pies sobre la tierra. La principal clave de este plantel es la humildad, la unión, el sacrificio, el trabajo, la convicción por lo que hacemos. Hay un grupo con muchas ganas de ascender, de hacer historia por nosotros y por el club", concluyó.
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