Flandria y Atlanta empataron 2 a 2 en un partidazo que arrancó ganando la visita con goles de Fernando Enrique y Horacio Martinez, pero que luego el local logró llegar a igualar con los tantos de Nicolás Rinaldi y Enzo Acosta.
El primer tiempo arrancó parejo. Con el correr de los minutos Flandria tomó la iniciativa y las riendas del partido. Con Nicolás Rinaldi como director de la orquesta empezó a generar buenas conexiones y construcciones colectivas, que eran llevadas a cabo y bien escoltadas por Matias Nouet y Enzo Acosta, quienes lastimaban por la bandas. Así se fue acercando al arco defendido por Francisco Rago, pero la falta de efectividad le impidió concretar las chances que generaba. El propio Rago, el palo y la puntería de quienes ejecutaban los remates mantenían el cero del arco de Atlanta. Que por su parte debió amoldarse y acomodarse en torno a ese contexto y buscar la manera de crearle peligro a su rival. Flandria dejaba muchos espacios porque el equipo quedaba largo cuando atacaba, y esto lo aprovechó la visita que con la calidad de sus jugadores apostó a las contras, que fueron su arma más peligrosa. Miguel Caneo y Lucas Colitto eran los que más desequilibraban, el primero con sus pases que le daban claridad al ataque y el segundo con su decisión y velocidad. Solo le costaba gravitar y ser profundo cuando el juego se hacía pausado y no vertiginoso, donde sí estaba cómodo. Sobre el final del primer tiempo, Atlanta pudo ponerse en ventaja. Matias Molina mandó un centro que se desvió en el camino y desacomodó a la defensa, pero que Fernando Enrique pudo conectar sin problemas para abrir el marcador. La visita se fue al entretiempo arriba, aunque sin merecerlo. No porque jugara mal, si no por la cantidad de ocasiones que generó el local.
En el inicio del complemento, Horacio Martinez de pecho, luego de otro centro de Molina aumentó la diferencia para Atlanta y le dio un duro golpe a Flandria, que parecía no tener respuestas. Allí, Ignacio Colombini casi marca el tercero pero su cabezazo se fue rozando el travesaño. Atlanta se relajó por demás y su rival comenzó a crecer sin que lo notara. Con paciencia y sin resignar su idea de juego fue por el descuento, que luego de perderse varios goles, consiguió. Javier Martinez, que recién ingresaba, ingenió una gran jugada individual; bailó sobre la pelota, tocó y fue a buscar la devolución de una pared con Enzo Accosta y envió el centro atrás cuando Rago le salió a achicar. Ahí apareció Rinaldi para definir y quedar a tiro del empate. El tanto llegó en el momento justo, ya que fue el envión anímico suficiente para no desordenarse y ahora soñar con la igualdad. Siempre bajo el régimen de su idea de juego: buscando los espacios, gestando las jugadas con tranquilidad y logrando algún desequilibrio individual para romper líneas. Los cambios del Lobo Montenegro le dieron la cuota de frescura y claridad necesaria para ir por el objetivo. Por el despliegue y la superioridad demostrada en intenciones, llegó su premio. En una de las tantas arremetidas de Enzo Acosta: corrió, ganó en velocidad a pura potencia y tocó con Esteban CIaccheri que se la cedió a Rinaldi. Este pudo haber definido, pero hizo la pausa y asistió con un toque sutil a quien inició la jugada, ante la salida de Rago. El propio Acosta finalizó la buena acción colectiva y concreto el tanto con el arco a su merced para desatar la euforia en el Carlos V y conseguir empardar la historia. Atlanta se encontró desmadrado y atónito ante un Flandria que pareció hipnotizar a los jugadores del Bohemio que despertaron tarde del trance y con el empate ya en el resultado. Fue a buscarlo con alguna contra pero que no alcanzó para modificar el trámite. En la última, Flandria hasta lo pudo haber dado vuelta tras un centro de Acosta y posterior cabezazo de Martinez pero que Ciaccheri no llegó a conectar antes que Rago, que logró sacarla.
Así, Flandria empató, se quedó con un buen punto que vale un poco más por la manera en que se dio el partido y también mantiene su lugar en el Reducido por esta fecha. Aunque al no ganar no pudo acortar distancias con los 4 equipos que por ahora ascienden directamente. Por su parte, Atlanta se llevó un punto de Jauregui con gusto amargo ya que no logró mantener la diferencia que había conseguido. Al no haberse quedado con los tres puntos, quedó afuera de los 4 de más arriba y estará en zona de Reducido hasta la próxima fecha. Además no pudo romper la racha de 10 años sin ganar en el Carlos V (1 a 0 en 2009).
Flandria: Mauro Ruggiero; Javier Alderete (67 Javier Martinez), Juan Cruz Randazzo A, Alan Gimenez, Andres Camacho; Matias Nouet, Sebastian Mayorga, Alejandro Gonzalez (50 Gonzalo Gimenez), Enzo Acosta; Nicolas RInaldi (86 Julian Gimenez); Esteban Ciaccheri. DT: Andres Montenegro.
Suplentes: Matias Garavano, Victor Rodriguez, Martin Minadevino, Nahuel Barragan.
Atlanta: Francisco Rago; Matias Molina, Nicolas Cherro, Nahuel Tecilla, Alan Perez A; Fernando Enrique (81 Brian Oyola), Gabriel Seijas A, Miguel Caneo, Lucas Colitto; Ignacio Colombini (69 Lucas Modesto), Horacio Martinez (75 Fabricio Pedrozo). DT: Fabian Castro.
Suplentes: Facundo Ferrero, Mariano Bettini, Brian Miranda, Walter Mazzanti.
Síntesis:
Goles: 41 Enrique (Atl), 50 Colitto (Atl), 71 Rinaldi (Fla), 85 Acosta (Fla)
Arbitro: Sebastian Bresba. (No tuvo una buena tarde ni él ni sus asistentes. No cobró un claro penal para Flandria de Gabriel Seijas sobre Enzo Acosta en el segundo tiempo. Luego, cegado por el sol de frente, el asistente 2 marcó varios off side que no fueron y que le cortaron algunos contraataques a Atlanta cuando el partido ya estaba empatado.)
Cancha: Flandria
Ver más:
FLANDRIA
B METROPOLITANA
MONTENEGRO
ATLANTA
CASTRO
