El habilidoso mediocampista ofensivo ingresó en el segundo tiempo y las sociedades que conformó junto con Cristian Núñez y Marcelo Miranda le permitieron a Boca Unidos contar con mayor volumen de juego.
Los cambios dispuestos en el inicio del segundo tiempo por el técnico Christian Bassedas revitalizaron a Boca Unidos. Con Cristian Núñez y Mariano Miño, a los que se sumó Marcelo Miranda, el equipo correntino contó con mayor volumen de juego asociado, a lo que se sumó un cambio de actitud para ir a buscar con decisión el arco de enfrente y empujar a San Martín de Tucumán contra su propia área.
"Pudimos crear situaciones a partir del toque por el medio para después abrir la pelota por afuera y generar el 2-1", explicó tras el empate ante los tucumanos.
Miño ocupó un lugar en el banco de relevos, situación que llamó la atención, teniendo en cuenta que el mediocampista ofensivo es uno de los pocos jugadores que se salva de la crítica en el marco del oscuro presente futbolístico del equipo.
"Sabía que no iba a jugar porque el técnico paró en la semana el equipo, es una decisión que yo la respeto. No me sorprendió, está dentro de las posibilidades ir al banco, jugar o no ser citado", señaló el jugador al consultársele al respecto.
No obstante, señaló: "Creo que vengo haciendo buenos partidos; por ahí ante Chacarita no tuve mucho contacto con la pelota porque jugué en una posición diferente a la que suelo hacerlo, por una cuestión táctica que no salió mal, porque nos permitió presionar bien la salida de ellos", indicó, para agregar que "obviamente me gusta jugar suelto, de enganche, que es la posición en la que más cómodo me siento".
Miño se mostró contrariado porque a Boca Unidos le volvieron a marcar al comienzo del juego. "De nuevo nos volvió a pasar lo que ya nos ocurrió en partidos anteriores, porque nos metieron un gol antes de los diez minutos y a partir de ahí se nos hizo todo cuesta arriba", comentó.
Continuando con su análisis, indicó que "por suerte, en el segundo tiempo pudimos tener más la pelota, creamos situaciones, tuvimos las dos chances del penal, siguiendo la mala racha metimos solo uno, y nos llevamos un empate con sabor amargo porque sabemos que tenemos que sumar de a tres para terminar el campeonato lo más arriba posible".
Para finalizar, Miño expresó: "Tenemos que seguir trabajando para salir de esto que es culpa nuestra un poco y lo otro mala racha. Ojalá lo podamos revertir, porque todavía quedan siete u ocho fechas y no nos podemos caer".
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