El delantero de Brown reconoció lo "shockeante" que fue la infracción sobre Gustavo Turraca, aunque aclaró su "buena fé" por no haber observado la presencia del rival. "Se generó revuelo porque la jugada es fuerte y quedé expuesto", sostuvo
Martín Minadevino volvió a la titularidad el sábado en el equipo de Brown de Adrogué y, dentro de la derrota 2-0 frente a Los Andes, protagonizó una de las jugadas que mayor repercusión tuvo en el fin de semana futbolístico.
Lejos de su desequilibrio como parte de la ofensiva Tricolor, el atacante sufrió la expulsión a los 29 minutos de la primera etapa por una patada sobre el rostro de Gustavo Turraca, cuando intentaba despejar el balón a la salida del área.
Ante las críticas recibidas por la dureza de la infracción, Minadevino señaló: "Si bien es impactante y hasta a mí me resulta shockeante, cuando se habló de mala intención salí a aclarar que en el momento que me expulsan no reclamé nada, sino que quise explicarle al árbitro que no lo vi".
"Gente del ambiente, que me conoce, se comunicó conmigo para decirme que debía decir nada porque se sabe de mi buena fé. Se generó revuelo debido a que la jugada es fuerte y quedé expuesto, parece que habitualmente juego así aunque estoy lejos de eso", manifestó el atacante, en diálogo con Info Región.
La jugada
El impacto que se generó llevó la noticia a medios internacionales y se viralizó por las redes sociales, desde donde surgieron fuertes críticas para el jugador de Brown, sobre todo por el estado en que quedó la cara del mediocampista Milrayitas.
Desde su visión dentro de la cancha, Minadevino relató: "Nunca lo ví. Después del rebote miré la pelota para rechazarla y él venía forcejeando con Nicolás Servetto, quien en un resbalón lo desacomodó. Entonces, Gustavo no llegó a poner las manos y yo no advertí su presencia, por lo que tampoco tuve opción para reaccionar antes de chocarlo".
"Cuando me expulsaron aguardé en el túnel hasta que el entrenador lo sacó en el segundo tiempo para pedirle las disculpas del caso. Las aceptó en un diálogo ameno, me decía que me quedara tranquilo pero yo le insistía en pedirle perdón, por suerte ya pasó y lo importante es que él lo comprendió de esa manera", expresó el delantero.
El encuentro
Los dirigidos por Pablo Vico no sufrieron en demasía a pesar de jugar en gran parte del cruce con un jugador menos, pero la efectividad del Milrayitas en la pelota parada fue clave para definir el rumbo del resultado.
"La expulsión te condiciona, jugar con un hombre menos en un campo tan grande se siente. En el manejo lo padecimos pero no así en la profundidad, nos convirtieron de balón quieto, algo ajeno al marco del encuentro", concluyó Minadevino, en charla con este medio.
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