Tres referentes del conjunto que enfrentará a River por la Copa Argentina cuentan que casi todos los jugadores son hinchas del Xeneize. "Es el partido de nuestras vidas", coinciden quienes además de futbolistas y entrenadores tienen que salir a trabajar en la semana para ganarse el pan.
Hace semanas que Bahía Blanca se encuentra conmocionada por la noticia de que el humilde Liniers disputará el partido más importante de su historia al jugar con River por Copa Argentina el miércoles 3 en Formosa. Da la casualidad de que su técnico y la mayoría de los jugadores son hinchas de Boca.
Sin dudas que será el cotejo de mayor importancia en sus carreras para los jugadores del club y que también podría marcar un hito histórico en la institución. "Es el partido de nuestras vidas", coinciden el técnico Fabían Tuya, el defensor Mauro Martínez y el goleador Julio Acosta en una entrevista exclusiva para El Equipo.
Fabián Tuya, de 40 años, se transformó en entrenador de Liniers en enero de este año y vive en Punta Alta, a 30 kilómetros de Bahía Blanca. "Ojalá que contra Liniers el resultado se defina en la cancha, como corresponde", escribió Tuya, en su cuenta de Twitter después de haberse conocido el fallo del River-Boca por Copa Libertadores. Todos los días a la mañana, y hace 10 años, trabaja en el PAMI, la obra social de los jubilados, y a la tarde realiza el entrenamiento con sus dirigidos. "Trataremos de hacer un planteo inteligente, pero vamos a defendernos con la pelota y a tapar los circuitos de juego de ellos", promete con convencimiento el técnico, que sorprendió a los hinchas al manifestar que intentará inculcar que su equipo juegue con línea de tres.
"Los de River son jugadores muy inteligentes y con orden táctico. Es difícil dañar a un equipo tan importante con jugadores bárbaros. Intentaremos no sufrir el partido, para eso, necesitamos estar muy concentrados y activos", cerró el comandante de este plantel, que además admitió que es hincha de Boca y que "el 80 por ciento de los jugadores también lo son".
El Turu Martínez tiene 26 años y hace 21 que está en el club. Pasó por la escuelita, por las infantiles y por inferiores hasta llegar a jugar de marcador central en el plantel de Primera. Estudia a la mañana ingeniería química, a la tarde entrena con sus compañeros y la noche va a trabajar a las canchitas de fútbol que posee y que alquila a los muchachos de Bahía. "Hace poco tuve que dejar el estudio (iba por el cuarto año) porque no me están dando los tiempos para todo. Pero lo voy a terminar en algún momento", señaló el defensor. "La gente está enloquecida, es el partido más importante de la historia del club y eso, la gente que nos va a ver habitualmente lo demuestra. Todos piden alguna camiseta, que traigamos algún recuerdo, pero no creo que eso sea muy fácil", dice entre risas Martínez que confiesa ser hincha de Liniers, pero que en el fútbol de Primera es de Vélez. No quiso analizar cómo cree que se dará el encuentro, pero sí, dejar en claro algo: "Este partido lo tomamos más como un regalo para nosotros, va a ser un momento para disfrutar, pero sabemos que nuestro trabajo es hacer un buen papel en el Federal B, igual obviamente que a River le queremos ganar. Va a ser muy loco marcar a Aimar", concluyó el bahiense.
Por su parte, Acosta es delantero y es el máximo goleador de la historia de la institución con "180 goles y algo". Tiene 31 años y desde los 13 que está en el Chivo, cuando en 1997 se fue a vivir a Bahía Blanca. Además de jugar al fútbol, trabaja en su almacén, que lo tiene a 15 cuadras del estadio. "Acá lo que más se vende es la cerveza, ja", desliza el romperredes. Acosta subió la apuesta con su técnico y tiró: "El 97 por ciento del plantel somos de Boca, yo voy a jugar con la del Xeneize abajo… No, mentira ja, mirá si me echan a la mierda…", soltó a las carcajadas nuevamente. Para cerrar, el goleador anunció: "Para mí es la frutilla del postre de mi carrera, un partido único e irrepetible y lo quiero disfrutar al máximo".
UN POCO DE HISTORIA
Si bien ambos conjuntos ya se cruzaron en abril de 1986, en esa ocasión fue por un amistoso. Ese encuentro lo ganó el equipo de Nuñez por 3 a 2 con dos goles de Norberto Alonso y uno de Roque Alfaro, mientras que para el elenco bahiense los tantos los concretaron Quijano y Carlos García.
El nombre Liniers lo sugirió su primer presidente Santiago Medina, que admiraba al personaje histórico quien fue un pilar importante para que los ingleses fallaran en sus invasiones al Río de la Plata. Los colores –blanco y negro- los eligieron en homenaje al club Estudiantes de Buenos Aires y su apodo, el Chivo, viene de la chiva (barba) que el mismo presidente Medina tenía.
Esto es Liniers, un club según sus integrantes, de "clase media – alta", pero que transita por las canchas del Federal B y eso no le permite a sus futbolistas vivir solamente del fútbol, deben estudiar o trabajar.
La semana pasada arrancó el Federal B y Liniers debutó con el pie izquierdo al perder con Sansinena (hace menos de un mes ascendió proveniente del Federal C), y dos días después, volvió a perder, pero esta vez 3 a 2 con Pacífico (fundado en 1896, es el club más antiguo de Bahía Blanca). Otro panorama se vive en River que está teniendo un buen papel en el torneo de Primera y que viene de derrotar, en un partido histórico en Brasil, 3 a 0 al Cruzeiro.
En 2013, insólitamente, Estudiantes de Buenos Aires –que tiene los mismos colores que Liniers- eliminó a River de la Copa Argentina al ganarle por 1 a 0. Si el pequeño David alguna vez derrotó al gigante Goliat, si existió la caída del Imperio Romano, ¿por qué Liniers de Bahía Blanca no puede hacer historia y dejar afuera a River?
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