El nuevo DT de Gimnasia, ex Nueva Chicago, le hizo frente al viento zonda este martes por la tarde en el Legrotaglie y se presentó ante el plantel mensana, en medio de un optimismo generalizado
En medio de las ráfagas calientes del viento zonda, Omar Labruna, el flamante nuevo director técnico de Gimnasia y Esgrima, llevó adelante este martes en horas de la siesta la primera práctica desde su llegada a la provincia, para hacerse cargo del equipo mensana.
Con mucha expectativa por esta nueva etapa, que en la recta final del campeonato de la Primera B Nacional encuentra a Gimnasia peleando por no quedar relegado en los últimos lugares, el estadio Víctor Antonio Legrotaglie albergó una amena charla, primero con los dirigentes en el centro de la cancha, y luego entre el ex DT de Nueva Chicago y los jugadores del Lobo.
Luego de la charla, los jugadores se fueron al Gimnasio, con la colaboración Leandro Jorge como preparador físico y Gerardo Rojo como entrenador alterno, y los arqueros se quedaron entrenándose junto a Leonardo Aguirre, entrenador de arqueros.
"Me gustó la conversación que tuvimos en Buenos Aires y me gustó. Llegamos a un acuerdo rápidamente. La situación de Gimnasia es difícil pero me gusta este desafío", expresó Omar Labruna al programa Muchas Gracias, en Radio Nihuil.
"Me encontré con un club humilde y con muchas ganar de crecer. Tenemos que hacer el esfuerzo para mantener la categoría, a donde costó mucho llegar", agregó el orientador.
"Ojalá podamos encontrar el equipo y levantar en la parte futbolística. En pocos puntos hay muchos equipos y hay que tener confianza para lo que viene. A los jugadores los encontré golpeados por el partido del otro día".
Gimnasia se alista para volver a sumar de a tres en el torneo. El próximo sábado intentará reponerse de la derrota que sufrió ante Patronato en Paraná, cuando reciba en el Parque a All Boys, desde las 15.30.
