Gran parte de los goles convertidos por la Lepra se marcan en los 15' finales del partido. Como contracara, en el primer tiempo no hizo ninguno. Con los rivales directos le cuesta
Tras jugarse siete fechas, Independiente Rivadavia cuenta con un promedio de gol menor a la media del torneo con siete conquistas.
Pero a la hora de buscar responsables los delanteros tienen a favor que todos los goles fueron convertidos por ellos. Y metemos en la misma bolsa el que marcó Cardozo, porque lo hizo en una posición más adelantada que la habitual, como actuó el miércoles con Flandria.
Los seis que hizo la Lepra fueron hechos por las diferentes variantes en ofensiva, de los cuales dos, en tres encuentros, fueron en el Gargantini. Dos tiene Tarragona y completan la lista Cardozo, Curuchet, Fernández y Reinoso.
Hasta ahora Ferro es el más goleador con 16, más del doble de los Azules, a quienes solamente el Verdolaga les pudo hacer uno.
La particularidad es que gran parte fueron convertidos en los últimos quince minutos de los partidos.
Salvo el de Fernández, de penal, contra All Boys, todos se hicieron en el segundo tiempo.
En la etapa inicial, Independiente aún no convierte goles. Un déficit de este equipo.
La gran deuda se da contra los clubes que pelea en la tabla de promedios, porque enfrentó a tres y a ninguno le pudo ganar.
Como local empató con All Boys y Flandria y como visitante cayó goleado por Central Córdoba de Santiago del Estero.
Como contrapartida le ganó como visitante a Ferro, uno de los líderes del torneo.
La presión por sacar puntos ante contrincantes en la tabla de abajo le está costando más de la cuenta y no se puede dar el lujo de perder esos puntos en su lucha por la permanencia.
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