Alejandro Rébola se va a Ecuador y deja un enorme vacío en Independiente Rivadavia. El defensor, referente de los últimos tiempos en la Lepra, jugará hasta diciembre en el Mushuc Runa Sporting Club, equipo que participará en la edición 2019 de la Copa Sudamericana.
Para el cordobés no fue una decisión fácil de tomar: "Me costó, pero es un lindo desafío para mí y un paso grande. Nuestra carrera no es tan larga y si dejás pasar una oportunidad, no sabés lo que puede pasar. Era el momento", señaló.
Rébola, en diálogo con Ovación, hizo un repaso de los mejores y peores momentos que dejaron dos años y medio de estadía en Mendoza:
"Lo peor fue cuando llegue, porque no jugaba. Había llegado sin rodaje y me costó, además la defensa estaba muy bien. Me tocó jugar a lo último y me afiancé".
"Lo bueno que me llevo son los momentos vividos. Salvar la categoría de la forma en que lo hicimos, hacer una campaña histórica, dejar al club entre los primeros cinco, me llena de satisfacción porque sé que hice las cosas bien".
Está claro que en la Lepra no estuvo de paso: "En San Martín de Tucumán y acá me pasó que me encariñe. Con la gente, dejé muchos amigos. Mis compañeros se pusieron contentos, pero da cosa, porque es un lindo grupo que venimos armando. Después de haber vivido tantas malas, me da angustia. Pensé en quedarme seis meses más, pero son oportunidades que se presentan y hay que aprovecharlas".
Ale les pidió a sus compañeros algo muy especial: que no lo saquen del grupo de whatsapp. "Quiero estar al tanto, sentirme parte a la distancia", expresó el defensor.
El próximo martes, Rébola volverá a la provincia para rescindir contrato con Independiente. Después, partirá rumbo a su nuevo destino.
"Voy a extrañar mucho. Hice amistades hermosas, y fuera del club también. Como familia nos llevamos lo mejor de Mendoza. Todavía no viajé, pero me encantaría volver" cerró quien, sin dudas, dejó una huella en el Parque.
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